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Dossier Université Invitée: Barcelone
Historias de la Historia

Historia sin Literatura: un estudio comparativo de los proyectos historiográficos modernos en la Europa septentrional

History without Literature: a comparative study of modern historiographical projects in northern Europe
Inés García López

Résumés

Los proyectos de construcción histórica del origen de los pueblos en los países de la Europa septentrional hasta el siglo XVI están inspirados en los relatos míticos clásicos. Estos relatos fundacionales se mantienen en la Edad Media y no es hasta la publicación de la Britannia del historiador inglés William Camden en 1586 que se produce un punto de inflexión hacia un cambio de paradigma en los estudios historiográficos. Un siglo más tarde, la Rerum Danicarum Historia del historiador danés Johannes Pontanus continuará la estela de la nueva propuesta de escritura de la historia iniciada en el trabajo de Camden y consolidará este proyecto en la narración del pasado de los países escandinavos. Un proyecto que implicará la desmitificación del pasado histórico y que comenzará a dibujar los límites fronterizos entre historia y literatura. Este artículo realizará un estudio comparativo de los proyectos de escritura de la historia en estos países para mostrar de qué manera las obras de Camden y Pontanus suponen un giro en la historia de la historiografía y en los proyectos identitarios y políticos de dichos países.

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Texte intégral

  • 1 Turner, Philology: The Forgotten Origins of Modern Humanities, p. 201. Cita del historiador y filól (...)

All ancient history eventuates in Roman history, all modern history starts from it.1

  • 2 Ricoeur, Historia y narratividad, p. 83.

1La propuesta de análisis de un proyecto de escritura de la historia que presentamos en este artículo está orientada conceptualmente a la reflexión sobre la construcción del relato o narración de los hechos del pasado. Teniendo presentes los debates terminológicos del siglo XX en relación al análisis de los límites entre relato, narración, historia contada y narrada, el concepto de acontecimiento y el de temporalidad, y la interrogación ante la diferencia existente entre la pretensión de verdad de los estudios historiográficos y la ficción narrativa, partiremos para nuestro análisis del «hecho fundamental y radical de que elaboramos nuestra historia, de que nos encontramos en ella y de que somos seres históricos2». De esta afirmación se derivan las siguientes implicaciones metodológicas fundamentales en nuestro estudio: considerar la escritura de la historia como un objeto de estudio del cual analizaremos, por un lado, sus agencias en términos de enunciación en relación a su elaboración y construcción, y por el otro, sus implicaciones en términos de reordenación del campo de saber. Esta reordenación del saber que tiene lugar en el siglo XVI pone en crisis el modelo de conocimiento del mundo de las universidades medievales. Los avances y descubrimientos en el campo de las ciencias naturales durante el Renacimiento suponen un reto al monopolio en el campo del saber de lo que serán las disciplinas humanísticas. Desde este suceso, y hasta la sistematización del saber en las disciplinas actuales – herederas en su mayor parte de la ordenación decimonónica –, atenderemos en este artículo a la particularidad de los casos danés e inglés en las escrituras de sus historias nacionales. Observaremos en este análisis cómo los futuros estudios humanistas historia y literatura comienzan a desarrollarse por separado.

Las primeras publicaciones danesas de carácter historiográfico

  • 3 Christiern Pedersen llevó a cabo la primera publicación de la Gesta Danorum en latín en una imprent (...)
  • 4 Algunos ejemplos de estas obras son: el RUNIR seu Danica literatura antiqvissima…eller Literatura r (...)

2La Dinamarca medieval formaba parte del mundo latino, no tan sólo por el uso del latín como lengua culta sino también por participar de la cultura cristiana, que como el resto de las regiones occidentales de la Europa medieval fue clave para la alfabetización y la difusión de la escritura. La redacción de la historia danesa en esta época premoderna también comparte las coordenadas en las que se escribía la historia en la Edad Media. La primera obra histórica medieval de importancia escrita en Dinamarca fue la Gesta Danorum (Historia Danesa) del erudito danés Saxo Gramático, escrita en latín en el siglo XIII. Más adelante comentaremos el contenido de esta narración histórica traducida al danés en el siglo XVI3. A partir del siglo XVI se observa en el territorio danés un aumento sustancial de las publicaciones de carácter historiográfico. La temática de estas primeras publicaciones es muestra del interés en aquel periodo por parte de los daneses de escribir su historia. Además de la traducción de la Gesta Danorum al danés, las primeras obras que se publican contienen los siguientes términos en sus títulos: literatura danesa antigua, la historia de los godos, filosofía antiquísima noruego-danesa4.

La búsqueda documental en las tierras del norte

  • 5 El primer manuscrito escrito en Islandia en lengua vernácula es de mediados del siglo XII. Del sigl (...)

3La aparición de las primeras publicaciones en lengua danesa no supone un desplazamiento del latín como lengua culta, ya que las primeras obras historiográficas están escritas en latín. Pero sí que es novedoso y característico de esta época el interés por recopilar manuscritos y documentos escritos en el norte, un interés heredero de los estudios anticuarios medievales. El descubrimiento de la abundante cultura escrita en Islandia5 por parte de los daneses fue clave en la reelaboración y renovación del material que utilizarán para la narración de su historia.

4Los manuscritos medievales islandeses fueron estudiados, publicados y difundidos por primera vez en la Europa continental por la recién descubierta imprenta gracias al impulso editorial danés. La excelente bibliografía recogida por la Landsbókasafn Íslands - Háskólabókasafn6 – la Biblioteca nacional y universitaria de Islandia –, da cuenta de las más de 1000 publicaciones realizadas en Copenhague por islandeses o sobre temas concernientes a Islandia durante el período comprendido entre 1534 y 1844. Las primeras traducciones de textos islandeses medievales son testimonio de la apropiación que estaba realizando Dinamarca de los mismos con el objetivo de ampliar el capital cultural danés, estableciendo de esta manera una continuidad entre la Dinamarca del momento y un pasado heroico localizado – ya no en el mundo latino – sino en el norte. La recepción danesa de los textos islandeses medievales inaugura un ejercicio de renovación del relato de su pasado histórico.

  • 7 Consultar Wawn, «The Post-Medieval Reception of Old Norse and Old Icelandic Literature» para una an (...)

5Los eruditos islandeses que acudían a Dinamarca – recordemos que Islandia estuvo bajo la Corona danesa hasta 1944 – se encargaban de la transcripción de los manuscritos que custodiaba la Corona. Pero los islandeses no tan sólo se dedicaban a hacer acopio de los manuscritos y de la labor paleográfica, tan necesaria para su lectura. Ya en 1593, el erudito Arngrímur Jónsson, nacido en Islandia, pero formado en Dinamarca, publica en Copenhague su Brevis commentarius de Islandia, un texto en latín que introduce a la literatura islandesa medieval en el panorama literario europeo. En su obra Crymogaea sive rerum Islandicarvm (1609), el primer libro que narra la historia de Islandia, Jónsson hará interesantes referencias al uso que ha de hacerse de la documentación islandesa7.

6En 1730 se funda en Copenhague la Comisión Arnamagnæana para la conservación y el estudio de una colección de manuscritos y libros impresos de los que había hecho acopio el célebre erudito islandés Árni Magnússon, asistente del anticuario Thomas Bartholin en la Corte danesa. La biblioteca de Árni Magnússon era en su momento, y aún lo es hoy – bajo el nombre de Instituto Árni Magnússon para los estudios islandeses – la colección de manuscritos medievales escandinavos más grande del mundo.

El goticismo y la tensión política entre Dinamarca y Suecia

  • 8 Wawn, «The Post-Medieval Reception of Old Norse and Old Icelandic Literature», p. 320.

7Este interés hagiográfico que se aprecia en los volúmenes impresos en el siglo XVI, y que marcarán tendencia en el siglo XVII, es debido en parte a la tensión diplomática existente en aquel momento entre Dinamarca y Suecia. El enfrentamiento entre ambos países es visible en las publicaciones sobre la historia de los godos, escritas con la intención de establecer una continuidad entre las respectivas sociedades modernas y el espíritu heroico de los antiguos godos8. La tensión política entre Dinamarca y Suecia durante los siglos XVI y XVII cristalizará en una competición editorial que tendrá como consecuencia un aumento sustancial de las publicaciones sobre la historia de los antiguos pobladores de Escandinavia.

  • 9 Granlund, Olaus Magnus Historia de Gentibus Septentrionalibus. Rome 1555, p. 7; Skovgaard-Petersen, (...)
  • 10 Skovgaard-Petersen, Historiography at the Court of Christian IV (1588-1648), p. 9.
  • 11 Johannes y Olaus Magnus serán los últimos arzobispos católicos de Suecia. Tras el nombramiento de G (...)
  • 12 Adaptado de Granlund, Olaus Magnus Historia de Gentibus Septentrionalibus. Rome 1555, p. 274: «De c (...)

8Dos figuras clave y dos obras fundamentales en este periodo son las de los hermanos Magnus, los dos últimos arzobispos católicos de Uppsala. El historiador y teólogo sueco Johannes Magnus publica la Historia de omnibus Gothorum Sveonunque regibus en 1554, y su hermano Olaus Magnus publica la Historia de Gentibus Septentrionalibus un año después. Serán consideradas figuras clave en el movimiento cultural que se dio a conocer con el nombre de goticismo, un movimiento patriótico con la intención de glorificar Suecia a través de la composición de textos históricos que establecieran una continuidad con el pasado godo9. Los hermanos Magnus vivieron en el momento en el que Suecia abandonaba la Unión de Kalmar al ser nombrado rey Gustav Vasa en 1523. La salida de Suecia de la Unión de Kalmar desemboca en el enfrentamiento político y militar entre Suecia y los dos países restantes de la Unión: Dinamarca y Noruega. Tanto en la Guerra de los Siete Años del Norte (1563-1570) como en de la Guerra de Kalmar (1611-13), Dinamarca y Noruega se impusieron a Suecia10. Los enfrentamientos políticos estuvieron acompañados de la construcción de un relato histórico que exaltaba el pasado heroico de los suecos. Johannes Magnus escribe en su Historia sobre los orígenes de los suecos y de sus ancestros godos, apelando a la visión de Jordanes sobre la procedencia escandinava de los godos. Incluye una genealogía detallada de los reyes godos-suecos hasta el siglo XVI cuyo origen se remontaría al Antiguo Testamento: Magog, el nieto de Noé, fue el que fundó la primera comunidad goda. El establecimiento de este origen mítico ya es descrito por Isidoro de Sevilla en la Historia de regibus Gothorum, Vandalorum et Suevorum en el siglo VII. Johannes Magnus afirma también en su obra la existencia de una continuidad entre el pasado godo y la tradición bíblica, y mantiene, con esta afirmación, la manera de narrar el pasado característica de los historiadores medievales cristianos11. Pero es importante señalar que el héroe godo de Johannes Magnus es sueco, en ningún caso es danés. Tan sólo los suecos son los descendientes de Magog. Su hermano Olaus Magnus también establece diferencias con los daneses en su Historia e incluye en su libro octavo dos capítulos sobre las razones por las cuales los suecos mantienen un continuo enfrentamiento con los daneses, justificando la razón por la cual los suecos, y no los daneses, son los descendientes de los godos. En su argumentación, Olaus Magnus cita al célebre historiador Saxo Gramático, quien afirma en la Gesta Danorum, que los daneses son violentos, crueles gobernantes y traicioneros12.

Un nuevo proyecto historiográfico en la Corte danesa de Christian IV (1588-1648)

9El dominio militar y político de Dinamarca culmina con la victoria sobre Suecia en la Guerra de Kalmar en 1613. La corte del rey danés Christian IV, consciente del potencial político del país y de su dominio en Escandinavia, pone en marcha un proyecto cultural que aunará historiadores, pintores, arquitectos y músicos con el objetivo común de crear una imagen de Dinamarca como una monarquía poderosa, rica y culta, y por supuesto, con un pasado glorioso. A partir de 1620 es evidente el interés del gobierno danés por los trabajos historiográficos suecos de los hermanos Magnus, y eso influirá en las dos historias de Dinamarca escritas diez años más tarde.

10El proyecto cultural del rey danés incluía como piedra angular la publicación de una historia de Dinamarca en latín: Johannes Pontanus, historiador de corte del rey danés Christian IV, publica en 1631 la Rerum Danicarum historia, y Johannes Mersius su Historia Danica (1630-1638). Un segundo volumen de Pontanus abarcará la historia de Dinamarca hasta 1448, el año en el que Christian I, el predecesor de Christian IV, subiría al trono. La Historia de Mersius incluiría el periodo restante hasta 1550.

11El proyecto de escritura de la nueva historia de Dinamarca abarcará no tan sólo la historia a partir de la Gesta Danorum de Saxo Gramático, sino también todo el periodo anterior, cubriendo de esta manera toda la historia danesa desde sus orígenes. La historia de Dinamarca escrita en este periodo es novedosa por mostrarse escéptica ante las historias basadas en un pasado mítico, heroico o legendario que se estaban relatando en Europa durante la Edad Media, y aún en Suecia en el siglo XVI, tal y como hemos podido comprobar en las obras de los hermanos Magnus.

  • 13 La península de Jutlandia comprende el territorio de Dinamarca y el norte de Alemania. También se l (...)
  • 14 Skovgaard-Petersen, Historiography at the Court of Christian IV (1588-1648), p. 103, 155. Pontanus (...)

12Johannes Pontanus rebatirá en su Rerum Danicarum Historia el monopolio sueco sobre los godos que habían forjado los relatos de los historiadores suecos. Pontanus, basándose también en la obra de Isidoro de Sevilla, afirmará que la tierra originaria de los godos era toda Escandinavia y no exclusivamente Suecia. Pontanus utiliza argumentos diferentes a los que utilizaron los hermanos Magnus para desacreditar a los daneses: basándose en criterios etimológicos, señala un paralelismo entre los prefijos «got-, gut-, y jut»: Jutlandia13 también formaba parte del territorio de origen de los godos. Pontanus – de manera contraria a Johannus Magnus – para fundamentar su argumentación, citará a historiadores contemporáneos alemanes como el historiador y filólogo Beatus Rhenatus y el geógrafo Philipp Clüver14, y tomará como referentes las fuentes clásicas citando a Herodoto y a Estrabón. Las críticas de Pontanus dirigidas a Johannes Magnus se centran en las falsas deducciones que el historiador sueco expone en su obra. La manera de rebatir el trabajo de Magnus tiene que ver con una nueva concepción de lo que es la historia y de cuáles han de ser sus fuentes. La nueva manera de escribir historia en la Corte danesa va a recoger esta visión problemática de la hasta ese momento visión legendaria del pasado histórico y Pontanus reescribirá una versión alternativa de los orígenes de la historia danesa que dejará a un lado los elementos míticos y legendarios y considerará como fuentes fiables los testimonios clásicos y los de comienzos de la Edad Media. Es en este sentido en el que comienza a ponerse en entredicho la credibilidad de la primera parte de la Historia Danesa de Saxo, prolija en episodios fantásticos y elementos mágicos.

  • 15 Jon Jacobsen Venusin, profesor de retórica en la Universidad de Copenhague expone estos argumentos (...)

13Para escribir el pasado histórico remoto de Dinamarca, Pontanus busca referencias en el mundo clásico. Son los autores clásicos los que contienen información fiable sobre el pasado danés. Esta también fue la manera de trabajar de William Camden, respecto a la historia de Inglaterra, de Buchanan respecto a la historia de Escocia, y de Rhenanus y Lazius respecto a la historia de Alemania: la citación de textos clásicos y la predilección por las deducciones etimológicas. El mismo argumento utilizado para criticar la Gesta Danorum, será aplicado a la fabulería goda del historiador sueco Johannes Magnus y la exclusión de elementos fantásticos se convierte en una condición sine qua non de cualquier escrito histórico15.

14La solución para la composición de una nueva historia fundacional de Dinamarca pasa por la conciliación entre las fuentes clásicas y la Gesta Danorum de Saxo Gramático: Pontanus señala al rey Gotricus como el primer rey que se puede datar históricamente, es decir, que aparece citado por los maximis authoribus: las fiables fuentes clásicas. Pero aún y así, y a pesar del escepticismo de Pontanus por la parte mítica de la obra de Saxo, no rechaza la figura de Danus – el héroe del mito fundacional de la Gesta Danorum – y continúa afirmando que la monarquía danesa desciende de él:

  • 16 Pontanus cita casi literalmente a Tito Livio: «Quae ante conditam condendamue urbem poeticis magis (...)
  • 17 Pontanus, 1631, p. 1: «Qui res Danorum a primis initjis ad posterorum memoriam literis consignatas (...)

Those who have written about the first beginnings of the Danes – particularly Saxo Grammaticus and others who follow him – all agree that Danus was founder of the people. I, however, putting these things aside or leaving them out for a short while, have found it better to begin with the migration of the Cimbrians from their home in their peninsula [Jutland]. These events are known from the greatest authors, whereas the other things – which are narrated instead, as being very old – largely resemble those traditions mentioned by the great author Livy, which belonged at the time before the foundation of Rome, or the time when it was about to be founded, and which were beautiful stories rather than facts based upon trustworthy historical proofs16. Meanwhile, I have not wanted to omit to bring forward that which has historical worth, although these things so remote from our own time as well as antiquity in general have a right not only to our reverence but also to our tolerance17.

  • 18 Skovgaard-Petersen, Historiography at the Court of Christian IV (1588-1648), p. 151.

15Pontanus en su Rerum Danicarum Historia cita al historiador romano Tito Livio. Livio también sospechaba de esas fabulaciones poéticas respecto a los orígenes de Roma, y esa misma sospecha es trasladada por Pontanus a las fábulas sobre los orígenes de Dinamarca, pero al igual que Livio, no negará ni refutará esas historias – será, en cambio, tolerante –. Ese escepticismo relativo establece una continuidad entre la manera de pensar el pasado de Roma y el de Dinamarca. En la introducción de su Historia, Pontanus también se muestra tolerante con la tradición anticuaria, de la cual él se desmarca por el tratamiento histórico que hace del material, ya que incluirá la descripción de hechos del presente y ordenará cronológicamente los acontecimientos18. Pontanus aplica esta método cronológico de narración a su estudio refiriéndose a él en el prólogo como Chorographica descriptio.

  • 19 Los primeros relatos sobre el territorio llamado Tule los encontramos en la Naturalis Historia (Lib (...)
  • 20 Arngrímur se refiere aquí al Íslendingabók de Ari þorgilsson, el primer historiador que escribió en (...)

16La fe en la veracidad de las fuentes clásicas que caracteriza el relato histórico de Pontanus es problematizada por el historiador islandés Arngrímur Jónsson. Un motivo de disputa entre ambos fue sobre el término Tule. Jónsson afirma en su libro Chrymogæa sive rerum Islandicarum (1609) que la Tule nombrada en los textos clásicos no se corresponde con la isla Islandia. Pontanus cree que sí y cita fuentes clásicas para sustentar su afirmación19. En 1643 Arngrímur publica su Specimen Islandiæ historicum, un texto en el cual reprochará al historiador danés el hecho de haber ignorado en su argumentación las fuentes históricas islandesas, que son los testimonios más convenientes para tratar los asuntos islandeses, y según los cuales Islandia no fue habitada de manera permanente hasta la llegada de los noruegos en el siglo IX20. El historiador islandés Arngrímur, en el siglo XVII, reclama la validez de las fuentes islandesas medievales como fuentes históricas fiables y con valor de verdad, y que los documentos islandeses sean incluidos en la investigación historiográfica con el mismo valor que los testimonios clásicos, siendo además en el caso de la historia de los ancestros de los daneses, testimonios aún más válidos que los de los clásicos. Las investigaciones del anticuario danés Ole Worm también tomaron como referente los documentos islandeses que estaban siendo estudiados y publicados en Dinamarca a lo largo de ese siglo. Ole Worm no era historiador de corte, fue el médico personal del rey Christian IV, y realizaba investigaciones en el campo de la física y de la medicina. Su inclinación por el conocimiento enciclopédico y sus investigaciones sobre el mundo natural lo ponen en la misma órbita que muchos eruditos renacentistas europeos contemporáneos. No recibió el encargo de escribir ninguna historia de Dinamarca, pero paralelamente a la redacción de las historias oficiales que se estaban realizando en ese momento, publica en 1636 el libro RUNIR seu Danica literatura antiqvissima. Es el primer tratado sobre piedras rúnicas con ilustraciones de algunos monumentos rúnicos que actualmente ya no se conservan. Para la redacción de su literatura danesa antigua fueron fundamentales los testimonios islandeses, y esto marcó una diferencia con la manera de trabajar de Pontanus y del resto de historiógrafos contemporáneos cuya inclinación por la citación de fuentes clásicas se convirtió en un gesto programático inevitable.

17La nueva manera de escribir la historia en la Corte danesa supone un cuestionamiento del origen de las fuentes, a las cuales se les ha de aplicar un criterio de fiabilidad para ser consideradas históricas. Este criterio está fundamentado en la citación de fuentes clásicas. Además, la presentación del material será histórica en tanto en cuanto esté ordenada cronológicamente. Esta ordenación temporal, como veremos a continuación, diferenciará la narración histórica del material erudito acumulado por los estudios anticuarios. Y aún dos elementos más serán característicos de estos nuevos relatos históricos: el cuestionamiento del relato clásico de su pasado y la inclusión de la historia política del momento. Para comprender este giro en la historia de la historiografía es fundamental la lectura y el análisis de la Britannia del historiador William Camden.

La Britannia de Camden: el mito fundacional de origen troyano bajo sospecha

18En Inglaterra se construyó, al igual que en Dinamarca y que en muchos otros países europeos, un relato clásico del pasado, es decir, una elaboración de su origen como pueblo diferenciado del resto de pueblos, cuyos antepasados se remontan a héroes griegos, romanos o a personajes bíblicos. En estos términos se inscribe la obra Historia Regum Britanniae de Geoffrey de Monmouth, un texto escrito en latín en el siglo XII sobre los reyes de los britanos.

  • 21 Monmouth, Historia Regum Britanniae, Liber I. Caput VIII: «Viso tandem regno affectavit Brutus civi (...)

19Geoffrey de Monmouth en su History of the Kings of England, escrita en 1130, extiende el linaje real de Inglaterra hasta los héroes bíblicos: Adán, Noé, Príamo, Eneas, Ascanio, Silvio y Brutus. El mito fundacional de origen troyano de Inglaterra es relatado por Monmouth de la siguiente manera: al igual que el Eneas de Virgilio viaja de Troya a Roma, Brutus viajará de Roma a la ciudad que será llamada Londres21.

  • 22 Cabe aclarar que en la Gesta Danorum, Danus no es un héroe troyano. En la Historia Normannorum de D (...)
  • 23 Camden, Britannia sive Florentissimorum regnorum, p. 5. (Trad. Philemon Holland, 1610: http://www.p (...)

20El historiador inglés William Camden en su Britannia sive Florentissimorum regnorum, Angliæ, Scotiæ, Hibernæ, et insularum adiacentium ex intima antiquitate chorographica descriptio de 1586 muestra escepticismo ante el relato clásico del pasado de Inglaterra y sus afirmaciones son consideradas un punto de inflexión hacia una nueva orientación en los estudios historiográficos. En su Historia, Camden enumera los héroes sobre los cuales se han construido los relatos fundacionales de los franceses, de los escoceses, de los daneses, y de los britanos: Francia consideraba a Francus, hijo de Príamo, como el héroe troyano del mito fundacional; para Dinamarca, el héroe correspondiente era Danus22, y para Inglaterra: Brutus23. Camden rechaza este origen mítico fundacional, y a su héroe, y cita a todos aquellos eruditos del siglo XVI que están de su lado, tal y como más tarde – y siguiendo el proceder de este erudito británico – realizará Pontanus en su historia de Dinamarca. Las coordenadas del relato historiográfico están cambiando en Inglaterra, y la Corte danesa se muestra permeable a ello tanto por cuestiones políticas y militares como por cuestiones religiosas.

21La reforma protestante comporta un cambio en las monarquías de los países más septentrionales. El protestantismo se adopta como religión oficial en Suecia en 1523, en Inglaterra en 1534, en Dinamarca-Noruega-Islandia en 1536 y en Alemania en 1555. La puesta en cuestión del relato mítico fundacional que pasaba por Roma que inicia Camden respecto a la historia de Inglaterra habrá de entenderse también bajo las coordenadas de la reforma del catolicismo. Las obras de los hermanos Magnus también son un ejemplo del relato mítico fundacional que Camden pone en crisis en el siglo XVI. Sus Historias, al situar el origen de los godos en la descendencia de Noé, establecen una continuidad con los relatos fundacionales medievales y forman parte de la tradición criticada por Camden.

22El giro historiográfico no tan sólo pone en crisis el relato mítico fundacional sino que también cuestionará la labor de los anticuarios y eruditos. Lo que será el relato histórico habrá de diferenciarse de estas prácticas medievales caracterizadas por la colección y clasificación de objetos antiguos. William Camden era considerado un erudito y anticuario en su época. Christian IV también contaba con anticuarios como Ole Worm en su corte. ¿En qué momento se produce la diferenciación entre anticuario e historiador, unas designaciones con las que actualmente nombramos a estas figuras que escribían sobre todo aquello relacionado con el saber?

  • 24 Momigliano, «The Rise of Antiquarian Research», p. 61, 71.

23El interés por coleccionar manuscritos, analizar una gran variedad de temas desde diferentes ángulos y exponerlos con gran erudición era algo común en los estudios anticuarios de los siglos XVI y XVII. Pero la erudición – ya desde Polibio – no era considerada una cualidad de un buen historiador. Un aspecto fundamental en los trabajos históricos en la antigüedad era la narración cronólogica24. La historia, para Tucídides y Polibio, consistía en la narración cronológica de los hechos militares y políticos. La concepción de historia para los antiguos era la tucidiana, que era sinónimo de historia política y estaba caracterizada por el papel central del presente en su investigación histórica. La descripción del pasado no era significativa en sí misma, como sí lo era en la tradición histórica de Herodoto, sino que pasará a ser el preludio del presente, que es de lo único de lo cual se pueden obtener evidencias fiables:

  • 25 Momigliano, The Classical Foundations of Modern Historiography, p. 46.

Political history – «Thucydidean» history – continued to be the history par excellence for the majority of the ancients. Etnography, biography, religion, economics, art, when touched upon at all, remained marginal25.

24Cuando Aristóteles – nacido una década más tarde que Tucídides – marca una diferencia entre poesía e historia, tiene muy presente la concepción tucidiana de la historia, aunque cite a Herodoto. El hecho de que la Historia de Herodoto estuviera escrita en prosa, no es significativo para Aristóteles para ser considerada como historia:

  • 26 Aristóteles, Poética, p. 56.

25La diferencia estriba en que uno narra lo que ha sucedido y el otro lo que podría suceder. De ahí que la poesía sea más filosófica y elevada que la historia, pues la poesía narra más bien lo general, mientras que la historia, lo particular26.

  • 27 El término «antiquarius» es del siglo XV. No existe un término que aúne los diferentes estudios o i (...)
  • 28 Skovgaard-Petersen, Historiography at the Court of Christian IV (1588-1648), p. 150: El libro de Fl (...)

26Esta concepción particular de la historia está con consonancia con la versión tucidiana y este hecho es muy relevante, ya que acabará generalizando en Grecia esta concepción de historia que se entenderá en oposición a las disciplinas citadas anteriormente. Los estudios anticuarios en la antigüedad27 presentaron ocasionalmente la información en orden cronológico, y esta también fue la manera de proceder de los estudios anticuarios renacentistas, de los cuales la Italia Illustrata de Flavio Biondo fue un modelo indiscutible28. Un segundo aspecto compartido por los eruditos de la antigüedad y los anticuarios renacentistas fue su distancia respecto a los temas relacionados con la historia política. El motor de estos estudios era la recuperación o redescubrimiento de las tradiciones antiguas. A pesar de que los anticuarios fueron considerados por sus contemporáneos como estudiosos apasionados del pasado que no eran historiadores, su búsqueda sistemática de fuentes y documentos, así como su interés por los pueblos de la antigüedad fueron dos factores de gran impacto para la gestación de las historias nacionales.

27El debate sobre la división entre lo que es historia y lo que es poesía se retoma en los siglos XVI y XVII. El filósofo británico Francis Bacon en su obra de 1605 Of the Dignity and Advancement of Learning debate cuáles son las distintas divisiones del saber y en qué se diferencian y para ello realiza una crítica de los estudios anticuarios. En el segundo libro de su obra traza los límites de las tradicionales categorías aristotélicas: la historia, la poesía y la filosofía. Bacon divide la historia en: natural, civil, eclesiástica y literaria. Dentro de la historia civil, distinguirá tres clases: los memoriales, las historias completas y las antigüedades, a las que considera historia deteriorada, y, sobre las antigüedades, el filósofo añade:

  • 29 Bacon, The Advancement of Learning by Lord Bacon, p. 303.

Antiquities, or remnants of histories, are (as was said) like the spars of a shipwreck; when, though the memory of things be decayed and almost lost, yet acute and industrious persons, by a certain persevering and scrupulous diligence, contrive out of genealogies, annals, titles, monuments, proper names and styles, etymologies of words, proverbs, traditions, archives and instruments as well public as private, fragments of histories scattered about in books not historical, - contrive, I say, from all these things or some of them, to recover somewhat from the deluge of time: a laborious work indeed; but agreeable to men, and joined with a kind of reverence; and well worthy to supersede the fabulous accounts of the origins of the nations, and to be substituted for fictions of that kind; entitled however to the less authority, because in things which few people concern themselves about, the few have it their own way. In these kinds of Imperfect History I think no deficiency is to be assigned; for they are things, as it were, imperfectly compounded, and therefore any deficiency in them is but their nature29.

28Bacon, siguiendo la estela de los historiadores clásicos Tucídides y Polibio, califica a los estudios anticuarios de historia imperfecta, y los considera relatos fabulosos, ficciones sobre el origen de las naciones que carecen de autoridad. Comienza a trazarse con ello una reordenación del saber entre aquello que está del lado de la ficción y aquello que está del lado de la historia.

El nacimiento de la historiografía moderna

29El diseño de las nuevas coordenadas de redacción de la historia está promovido por las instituciones políticas y las autoridades científicas que delimitan una metodología cimentada en las fuentes clásicas, que ordenará bajo el criterio de veracidad-fantasía las narraciones que se habían realizado hasta ese momento sobre los pueblos antiguos y sus mitos fundacionales y va a marcar unas claras directrices para la redacción de las nuevas historias nacionales.

  • 30 No procede en nuestro caso describir la transformación de la filosofía en este periodo, pero sí rem (...)

30A lo largo del siglo XVII se agudiza la diferencia entre la historia y los estudios anticuarios que ya había sido trazada por los antiguos. El nuevo concepto de historia también va a generar un reajuste en su relación con la poesía – entendida en sentido aristotélico – y una transformación de los contenidos de la misma. La redacción de las historias nacionales de los países septentrionales a partir del siglo XVI va a poner en tela de juicio los fundamentos míticos de los orígenes de los pueblos. Uno de los detonantes para esta revisión de sus pasados es el paso de las monarquías católicas a las monarquías protestantes en el norte de Europa. Los autores medievales habían extendido los orígenes de sus pueblos en la redacción de sus historias hasta tiempos bíblicos: desde Eneas en Troya – cuna de los héroes de la antigüedad clásica– hasta Adán en el paraíso, otorgando así los fundamentos bíblicos al mito fundacional de origen troyano. Tras la reforma protestante a mediados del siglo XVI, países como Dinamarca o Inglaterra, empiezan a reescribir sus historias. Que los mitos fundacionales clásicos de las ciudades sean calificados como falsos, como fábulas, atiende a que son poesía y no historia, tal y como dictan los cánones clásicos aristotélicos, pero a las monarquías protestantes también les interesa que sean considerados falsos o no históricos por el papel central que Roma tiene en ellos. La división aristotélica entre poesía, filosofía e historia aún se mantiene en el siglo XVI y en el XVII, pero se redefinen los tres términos30: los contenidos de la poesía se ampliarán con el material nórdico llegado de Islandia, y las fuentes clásicas se irán desplazando de la antigua Roma a la antigua Escandinavia. La redefinición de lo que es poesía pasará por desechar el contenido mítico clásico y, sobre todo, del contenido bíblico ampliado en la Edad Media. La materia del norte será a partir de este siglo el fundamento de los orígenes de la literatura danesa antigua, y también lo será en parte de la literatura inglesa.

31La historia se caracterizará por disponer en orden cronológico el material seleccionado, realizar la selección de la información según criterios de fiabilidad tomando como referentes a las fuentes clásicas, incluir datos y hechos sobre el presente y rechazar las leyendas y los héroes del mito fundacional tradicional como material histórico. El resultado son unas renovadas historias con muchos datos sobre acontecimientos militares y políticos que cuentan con la incorporación de las biografías de los reyes vigentes estableciendo de esta manera los fundamentos históricos – hasta ese momento míticos – de las monarquías más septentrionales con el objetivo de afianzar su poder político y religioso.

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Bibliographie

Aristóteles, Poética, Madrid, 2006, Alianza.

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Notes

1 Turner, Philology: The Forgotten Origins of Modern Humanities, p. 201. Cita del historiador y filólogo danés Barthold Georg Niebuhr (1776-1831).

2 Ricoeur, Historia y narratividad, p. 83.

3 Christiern Pedersen llevó a cabo la primera publicación de la Gesta Danorum en latín en una imprenta de París en 1514 con el nombre: Danorum regum heorumque Historiae. Al parecer, él mismo realizó una traducción al danés pero no se ha conservado. La primera traducción que ha llegado a nuestros días de la Gesta es la de Anders Sørensen Vedel, publicada en Copenhague en 1575 bajo el nombre Den danske Krønicke.

4 Algunos ejemplos de estas obras son: el RUNIR seu Danica literatura antiqvissima…eller Literatura runica (1636) de Ole Worm o la Philosophia antiqvissima Norvego-Danica dicta Woluspa (1665) de Peder Resen.

5 El primer manuscrito escrito en Islandia en lengua vernácula es de mediados del siglo XII. Del siglo XII hasta el siglo XVI se conservan 750 manuscritos. Esta cifra dobla la producción de manuscritos de Noruega o de Dinamarca de este mismo periodo. Gunnlaugsson, «Manuscripts and Paleography», p. 246.

6 http://landsbokasafn.is/index.php/news/733/224/Icelandic-bibliography-1534-1844 (consultada el 24/07/2018)

Respecto al número de libros impresos en las principales capitales de los países escandinavos: en Copenhague se publican 1197 libros relacionados con Islandia, en Estocolmo 43, en Oslo tan sólo 8. En Islandia, en Hólar se publican 490 y en Viðey, 289. Aún y así, la delantera indiscutible de este período a nivel de publicaciones la lleva Dinamarca.

7 Consultar Wawn, «The Post-Medieval Reception of Old Norse and Old Icelandic Literature» para una análisis introductorio a la recepción post-medieval de la literatura islandesa.

8 Wawn, «The Post-Medieval Reception of Old Norse and Old Icelandic Literature», p. 320.

9 Granlund, Olaus Magnus Historia de Gentibus Septentrionalibus. Rome 1555, p. 7; Skovgaard-Petersen, Historiography at the Court of Christian IV (1588-1648), p. 166. Más información en Johannesson, K. The Renaissance of the Goths in Sixteenth-Century Sweden, 1991.

10 Skovgaard-Petersen, Historiography at the Court of Christian IV (1588-1648), p. 9.

11 Johannes y Olaus Magnus serán los últimos arzobispos católicos de Suecia. Tras el nombramiento de Gustav Vasa como rey se instaura la religión protestante en Suecia y los dos hermanos han de mudarse a Italia. De hecho, sus obras serán publicadas ya en Roma.

12 Adaptado de Granlund, Olaus Magnus Historia de Gentibus Septentrionalibus. Rome 1555, p. 274: «De causis perpetuæ discordiæ, quam Sueci siue Sueones, et Gothi contra Danos gerunt: SVECI, ac Gothi cur tam ferocibus animis, et armis contra Danos ferantur, ipse Danorum diligentissimus historicus (Saxo clarissim’ Danorum historicus) in XVI. libris suis hincinde vsque ad summum horrorem apertissimam reddit rationem. Vbique enim meminit gentis suæ tam violentum, et truculentum regimen in subditos, ac dolosam amicitiam in vicinos (...)», Olaus Magus Historia, Liber Octavus, Cap. XXXVI.

13 La península de Jutlandia comprende el territorio de Dinamarca y el norte de Alemania. También se la conoce como Península címbrica.

14 Skovgaard-Petersen, Historiography at the Court of Christian IV (1588-1648), p. 103, 155. Pontanus se embarca en la discusión filológica con su contemporáneo alemán Beatus Renathus. Este filólogo e historiador alemán defiende que el pueblo germano de los cimbros pertenece a los vigevones y no a los ingevones. Pontanus se muestra en desacuerdo con esa afirmación y para ello arguye que tanto Plinio en su Naturalis historia como Tácito en la Germania se refieren a los germanos del norte como a los ingevones (ingaevones o ingvaeones). Además utiliza el siguiente argumento etimológico: el término «ingevones» proviene de la forma compuesta de los vocablos alemanes «eng» (estrecho) y «wohnen» (vivir), y ciertamente los que vivían en un área estrecha – en Jutlandia – eran los cimbros. Este ejemplo ilustra el método argumentativo utilizado por Pontanus (Pontanus, Rerum Danicarum Historia, p. 648-649).

15 Jon Jacobsen Venusin, profesor de retórica en la Universidad de Copenhague expone estos argumentos en De historia (1604) y De fabulis (1605) (Skovgaard-Petersen, Historiography at the Court of Christian IV (1588-1648), p. 116)

16 Pontanus cita casi literalmente a Tito Livio: «Quae ante conditam condendamue urbem poeticis magis decora fabulis quam incorruptis rerum gestarum monumentis traduntur, ea nec adfirmare nec refellere in animo est. Datur haec uenia antiquitati ut miscendo humana diuinis primordia urbium augustiora faciat;» (Livi: Ad Vrbe Condita, Praefatio, 6-7, 1974, p. 2) «Los hechos previos a la fundación de Roma o, incluso, a que se hubiese pensado en fundarla, cuya tradición se basa en fabulaciones poéticas que los embellecen, más que documentos históricos bien conservados, no tengo la intención de avalarlos ni de desmentirlos. Es ésta una concesión que se hace a la antigüedad: magnificar, entremezclando lo humano y lo maravilloso, los orígenes de las ciudades;» (trad. Villar Vidal, 1990, p.162). He destacado en cursiva en le original en latín las frases casi idénticas que repite Pontanus en su texto en latín, que puede consultarse en la cita 16.

17 Pontanus, 1631, p. 1: «Qui res Danorum a primis initjis ad posterorum memoriam literis consignatas tradiderunt, quos inter præcipue Saxo Grammaticus alijque eum secuti, Danum gentis conditorem uno omnes consensu memorant. Nos, sepositis aut omissis paulisper istis, auspicium potius ab ipsa Cimbrorum e sua chersoneso egressione faciendum censuismus; Quod ea maximis authoribus prodita, ista vero, quæ ante conditam condendamque Romam a scriptoribus sunt memorata, decora magis relatu, quam incorruptis rerum gestarum monumentis tradita, summus authorum Livius retulit. Interim tamen in medium adduxisse, quæ historiam præsertim spectant, haud omittendum existimavi, quamvis et alias antiquitati et rebus illis a memoria nostra remotissimis, sua debeatur ut reverentia, sic etiam venia». Trad. al inglés por Skovgaard-Petersen, Historiography at the Court of Christian IV (1588-1648), p. 171.

18 Skovgaard-Petersen, Historiography at the Court of Christian IV (1588-1648), p. 151.

19 Los primeros relatos sobre el territorio llamado Tule los encontramos en la Naturalis Historia (Liber II, VI) de Plinio el Viejo y en la Geographica (Liber I, IV) de Estrabón. En estos textos se da cuenta de las aventuras del navegante griego Piteas de Marsella y de su llegada hacia el 400 a.C. a una tierra a la cual llamó Tule.

20 Arngrímur se refiere aquí al Íslendingabók de Ari þorgilsson, el primer historiador que escribió en islandés sobre la colonización de Islandia en el siglo XII.

21 Monmouth, Historia Regum Britanniae, Liber I. Caput VIII: «Viso tandem regno affectavit Brutus civitatem aedificare. Affectum itaque suum exequens, circuit totius terrae situm, ut congruum locum inveniret: perveniens autem ad Tamensem fluvium, deambulavit per littora, locumque nactus est proposito suo perspicuum. Condidit itaque civitatem ibidem, eamque Trojam novam vocavit: et hoc nomine multis postmodum temporibus appellata tandem per corruptionem vocabuli Trinovantum dicta fuit. » (trad. J. A. Giles, 1842: Brutus, having thus at last set eyes upon his kingdom, formed a design of building a city, and, with this view, traveled through the land to find out a convenient situation, and coming to the river Thames, he walked along the shore, and at last pitched upon a place very fit for his purpose. Here, therefore, he built a city, which he called New Troy; under which name it continued a long time after, till at last, by the corruption of the original word, at came to be called Trinovantum). Tal y como explica Monmouth en este párrafo, «Trinovantum» sería la forma corrupta de la denominación original en latín «Trojam novam» y se refiere a la actual Londres.

22 Cabe aclarar que en la Gesta Danorum, Danus no es un héroe troyano. En la Historia Normannorum de Dudo de Saint-Quentin, escrita en el siglo XI, Danus era hijo de Antenor, héroe procedente de Troya, y de ahí el origen troyano de los daneses. Pero tal y como afirma Ibáñez Lluch en la traducción de la Gesta Danorum al castellano: «Saxo, sin embargo, no recoge ni una sola fábula de tema troyano” (Saxo, 1999, p. 47). El tratamiento que está otorgando Saxo al relato del origen mítico de los pueblos diverge aquí del resto de las historias medievales europeas.

23 Camden, Britannia sive Florentissimorum regnorum, p. 5. (Trad. Philemon Holland, 1610: http://www.philological.bham.ac.uk/cambrit/contents.html, consultada 27/07/2018): «But seeing that in this our age, which hath escaped out of those darke mists of fatall ignorance, the French have renounced their Francio as a counterfet Progenitor (whereas the Frenchmen, quoth Turnebus a right learned man, stand highly upon their descent from the Trojans, they doe it in emulation of the Romans, whom they seeing to beare themselves proud of that Pedegree and noble stocke, would needs take unto themselves also the like reputation). And that for the Scots, such as be of the wiser sort have cast off their Scota, and truth it selfe hath chased away Hiberus, Danus, Brabo, and the rest of these counterfet Demi-gods and Worthies of the same stampe. Why the Britans should so much sticke unto their Brutus as the name-giver of their Iland, and to the Trojane originall, they greatly wonder: as who would say, before the destruction of Troie (which hapned in the thousand yeere or thereabout after Noahs floud), there had been no Britans heere, and as if there had not lived many valorous men before Agamemnon? Furthermore, they avouch that very many out of the grave Senate of great Clerks, by name Boccace, Vives, Hadrianus Junius, Polydore, Buchanan, Vignier, Genebrard, Molinaeus, Bodine, and other men of deepe judgement agree jointly in one verdict, and denie that ever there was any such in the world as this Brutus; also, that learned men of oure owne countrey, as many, acknowledge him not, but reject him as a meere counterfet.»

24 Momigliano, «The Rise of Antiquarian Research», p. 61, 71.

25 Momigliano, The Classical Foundations of Modern Historiography, p. 46.

26 Aristóteles, Poética, p. 56.

27 El término «antiquarius» es del siglo XV. No existe un término que aúne los diferentes estudios o investigaciones de este tipo – es decir, no históricas – en la antigüedad. Los términos «arqueológico, docto, erudito» son los adjetivos recurrentes en Grecia y Roma para referirse a los estudios que describían la historia arcaica o la historia desde sus orígenes. El término «antiquarius» fue tomado en el siglo XV probablemente del libro Antiquitates rerum humanarum et divinarum de Varro, escrito en siglo I aC (Momigliani, «The Rise of Antiquarian Research», p. 58, 60)

28 Skovgaard-Petersen, Historiography at the Court of Christian IV (1588-1648), p. 150: El libro de Flavio Biondo Italia illustrata (1474) fue un libro modelo para el resto de países europeos en el tratamiento anticuario del pasado. En su obra realiza una descripción sistemática de diferentes materias relativas a tradiciones, idioma, política, costumbres o instituciones, pero es una descripción carente de perspectiva histórica. Momigliano afirma que Biondo fue el precursor en la presentación sistemática de los manuales anticuarios y fundador de la investigación moderna anticuaria en todos los países de Europa. (Momigliano, «The Rise of Antiquarian Research», p. 71)

29 Bacon, The Advancement of Learning by Lord Bacon, p. 303.

30 No procede en nuestro caso describir la transformación de la filosofía en este periodo, pero sí remarcar que es en este siglo cuando se asientan las bases del pensamiento ilustrado y se establece el comienzo de la filosofía moderna.

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Pour citer cet article

Référence électronique

Inés García López, « Historia sin Literatura: un estudio comparativo de los proyectos historiográficos modernos en la Europa septentrional  »TRANS- [En ligne], 23 | 2018, mis en ligne le 18 octobre 2018, consulté le 11 février 2025. URL : http://0-journals-openedition-org.catalogue.libraries.london.ac.uk/trans/1963 ; DOI : https://0-doi-org.catalogue.libraries.london.ac.uk/10.4000/trans.1963

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Auteur

Inés García López

Doctora en Filología Alemana con la tesis El periplo de los Hávamál en los países de habla germánica: aspectos de su recepción ecdótica, traductológica y teórico-crítica. Es profesora e investigadora en la Facultad de Filología de la UB desde 2007. Ha realizado estancias de investigación en el Institut für Nordische Philologie de la Universität Münster (Alemania), en la Universität Wien (Austria), y en el Instituto Árni Magnússon para los estudios islandeses de Reykjavík (Islandia). Forma parte del equipo de investigación del IRCVM y sus líneas de investigación actuales consisten en el estudio de la composición poética en la Islandia medieval y sus posibilidades de interpretación, y en el análisis de los discursos de construcción identitaria en los países de habla germánica.

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