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Testimonios de mujeres con tribu en Sicca Veneria y su pertica

Marta González Herrero
p. 137-148

Résumés

Cinq mentions inhabituelles de tribus pour les femmes sur des inscriptions de la colonie Iulia Sicca Veneria et sa pertica sont étudiées. La recherche des nomina nous éclaire sur ce que l'on voulait transmettre en incluant la tribu dans le contexte démographique et onomastique des lieux où elles ont été trouvées.

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Texte intégral

Introducción

  • 1 Aglomeración localizada en la pertica cirtense, donde se documenta la sorprendente cifra de en to (...)

1La epigrafía latina hallada en el Imperio romano nos da a conocer a más de un centenar de mujeres en cuya nomenclatura personal figura una adscripción tribal. Los hallazgos se concentran en dos provincias hispanas y en tres localizadas en el norte de África: Lusitania, Bética, Numidia, África proconsular y Mauritania cesariense. Llama la atención la desigual distribución geográfica de los testimonios, buena parte de ellos recogidos en Thibilis1, mientras que los restantes pueden considerarse esporádicos.

  • 2 Forni 1976, p. 39, Encarnação 2002-2003, p. 129 ; Le Roux 2010, p. 118 ; González Herrero 2021, p (...)
  • 3 Lassère 1973, p. 129.
  • 4 Se parte de las lecturas del CIL a complementar con las contenidas en los corpora epigráficos que (...)

2Estas menciones resultan anómalas porque la tribu habitualmente es un elemento que forma parte de la nomenclatura de los hombres. Precisamente su excepcionalidad merece una explicación que sólo puede estar detrás de la intención de quienes la hicieron grabar. Los casos hispanos han sido estudiados con desigual profundidad2, pero no los documentados epigráficamente en el África romana, en su día considerados curiosidades sin mayor trascendencia por Jean-Marie Lassère3. El objetivo de este trabajo es indagar sobre qué pudo querer transmitirse asociando una tribu a la forma de identificación de cinco féminas que vivieron en la colonia Sicca Veneria y su pertica4, localizada en África proconsular.

1. Testimonios en la colonia Iulia Sicca Veneria (El-Kef, Túnez)

3n.o 1 – PALPENIA VENVSTA L. f. Q.

Referencias: CIL VIII, 16154

Palpenia / Venusta / L(ucii) f(ilia) Q(uirina) uix(it) an(nos) / VII h(ic) s(ita) e(st)attestation

4Emil Hübner dio a conocer este sencillo epitafio grabado en recuerdo de la muerte de una niña de siete años llamada Palpenia Venusta, pero no figura entre los testimonios de mujeres con tribu recogidos en los índices del CIL VIII (p. 243). Tras los duo nomina de la difunta, se lee la filiación – su padre era un L. Palpenius – seguida de una Q, sobre cuyo desarrollo el sabio alemán no hizo comentario alguno.

  • 5 Desde el siglo I, en Lusitania e Hispania Citerior contamos con testimonios recogidos también en (...)

5Nada tiene de sorprendente abreviar la tribu Quirina con la inicial y no sólo en el África romana5. Como acontece a lo largo y ancho del Imperio, en Sicca Veneria la abreviatura más habitual es Quir(ina), pero también se usa Q. en casos que no se discuten (CIL VIII, 16031, 16193), de manera que el de Palpenia Venusta no es el único testimonio recogido en la colonia.

  • 6 La alternativa para desarrollar la Q. en el epitafio de Palpenia Venusta sería q(uae) uixit annos(...)

6Pueden ponerse más ejemplos fuera de la colonia, pero, centrándonos en lugares donde sabemos de mujeres con Quirina, la Q. también se usa por ejemplo en Madauros y Thibilis. En la colonia flavia hay ocho féminas con adscripción tribal y Q(uirina) figura en la nomenclatura de tres de ellas: ILAlg I, 2273 (es mencionado otro difunto con Quirina sin abreviar), ILAlg I, 2607 y 2371. En Thibilis, donde el número de mujeres con tribu es muy numeroso, hay varias abreviadas con la inicial, por ejemplo, en ILAlg II, 5048 (hombre y mujer con Q.), ILAlg II, 5109 (hombre con Q. y mujer con Quir.), ILAlg II, 5665 (hombre) e ILAlg II, 5812 (hombre y mujer con Q.). En definitiva, la forma de abreviar la tribu carece de significación histórica6.

  • 7 Schulze 1991, p. 206; Solin, Salomies 1988, p. 136
  • 8 No aparece en los índices onomásticos de las inscripciones latinas de Túnez y del África romana e (...)

7Encontramos el nombre gentilicio Palpen(n)ius entre los nomina uirorum et mulierum recogidos en el CIL, con dos testimonios hallados en el África romana (CIL VIII, Pars V, Indices, p. 53): el de Palpenia Venusta y el de Palpennius Felix (CIL VIII, 9218), igualmente referenciados por Wilhelm Schulze7. Puesto que la lectura de Palpennius en CIL VIII, 9218 ha sido corregida por P(ublius) Alpennius Felix (AE 1951, 143), el nombre gentilicio de Palpenia Venusta es hapax en el Imperio romano8.

  • 9 ILS 946 (Pola), CIL XIV, 2241 (mons Albanus), AE 1984, 221; 2001, 807; 1988, 333; 1984, 220 (Pomp (...)
  • 10 Ferchiou 19854, p. 182-184.

8Schulze otorga un origen etimológico etrusco tanto a Palpen(n)ius como a Palpellius. Los testimonios de este último se concentran en la ciudad de Pola, lugar de origen de la familia de Sex. Palpellius Hister, senador de época julio-claudia9. Tan sólo tres Palpellii dejaron huella epigráfica fuera de Histria e Italia y precisamente un Sex. Palpellius lo hizo en África proconsular10, lo que confirma la presencia de inmigrantes itálicos en esta provincia. Inscrito en la misma tribu que Palpenia Venusta, Sex. Palpellius P. f. Quir. Faustus no era originario de aquellos lugares donde formó parte de la élite de poder: Carthago y Furnos Maius (Henchir Ain Fourna, Túnez), este último en los límites de la pertica cartaginense con territorio númida.

  • 11 De acuerdo con los criterios definidos para datar los epitafios paganos hallados en África por J. (...)

9La ausencia de consagración a los dioses Manes, el nombre de la difunta en caso nominativo y el uso de la fórmula h, s, e, sin identificar a quien encargó el memorial, permiten situar la muerte de Palpenia Venusta a comienzos del siglo I11.

  • 12 En CIL VIII, 1632 y 1648 leemos Iulia Veneria Cirta Noua Sicca. N. Kallala (2000, p. 89-96), sost (...)
  • 13 Sobre la urbanización de África antes de la llegada al poder de los Flavios: HAAN VII 1928, p. 18 (...)
  • 14 La reconfiguración fue coincidente con la unificación de Africa Noua y Africa Vetus en la provinc (...)
  • 15 Véanse las tablas elaboradas por J.-M. Lassère (1977, p. 150-155, 169-204). De acuerdo con N. Kal (...)

10Nos encontramos ante la descendiente de uno de los primeros ciudadanos en Iulia Sicca Veneria12, dado que los historiadores atribuyen a Octavio / Augusto la concesión del estatuto colonial a Sicca. El epíteto Iulia – no Augusta – en el nombre de la ciudad le señala como artífice de la promoción13, iniciativa que tiene pleno sentido dado que intervino los territorios continuos al de Sicca Veneria. Refundó Carthago, cuya pertica cesariana fue reorganizada14, e impulsó deductiones en la colonia Iulia Iuuenalis Honoris et Virtutis Cirta, cuyo territorio estaba siendo organizado en 26 a.C. Así lo confirma un epígrafe hallado en Ksar Mhijiba que recuerda la distribución de tierras procedentes de su ager publicus entre colonos ciues Romani (ILAlg II, 4226). Se baraja la posibilidad de que Octavio / Augusto también planificara un trasvase poblacional de colonos desde Cirta a Sicca Veneria, lo que explicaría la coincidencia de gran parte de los nombres gentilicios documentados en ambos lugares15.

11La tabla 1 recoge las estructuras nominales de la población conocida a través del importante dossier epigráfico hallado en Sicca Veneria.

Tabla 1: Población de Sicca Veneria

Mujeres

Todas sólo con duo nomina excepto

duo nomina + filiación con praenomen

1) Un caso con indicación de uxor

2) Un caso de filiación con tria nomina

62

duo nomina + filiación (nunca praenomen)

2

nombre único

50

nombre único + filiación (nunca praenomen)

5

Hombres

Todos sólo con tria nomina excepto

tria nomina + filiación con praenomen + tribu

43

tria nomina + filiación con praenomen sin tribu

21

tria nomina + filiación (nunca praenomen) sin tribu

1

tria nomina sin filiación+ tribu

6

duo nomina

57

duo nomina con filiación (nunca praenomen)

3

1) CIL VIII, 1707; 2) CIL VIII, 16068, p. 2707.

  • 16 Lo que se explica porque es el nomen el que define el estatuto jurídico ciudadano, tal como compr (...)
  • 17 Así lo constató J.-M. Lassère (1973, p. 129) en Carthago, Thugga, Ammaedara, Thala, Lambaesis, Th (...)

12El epitafio que recuerda la muerte de Palpenia Venusta L. f. Q. fue grabado en un contexto onomástico caracterizado por la gran difusión del sistema onomástico de tria y duo nomina y la poca tendencia a indicar la tribu cuando se disfruta de la ciudadanía romana. Aunque se asume que fue siendo más inusual a partir del siglo II, la documentación epigráfica evidencia que la adscripción tribal nunca fue mencionada sistemáticamente16. Un buen ejemplo es el África romana, donde incluso en el siglo I no suele incluirse en la nomenclatura personal17.

  • 18 Chastagnol 1990.
  • 19 M. Dondin-Payre (2001, p. 259-283) propone criterios alternativos para detectar a la población pe (...)

13Desde el trabajo de A. Chastagnol18, se atribuye el estatuto jurídico ciudadano a la persona cuya identidad es definida por un praenomen, nomen y cognomen o por los dos últimos. En cambio, se considera libre sin ciudadanía a la identificada mediante un idionimo seguido de filiación con patronímico, si bien los estudios onomásticos van mostrando que la situación no era tan categórica ya que los peregrini podían usar otras fórmulas19. Atendiendo a estos criterios, en Sicca Veneria es llamativa la escasa huella epigráfica dejada por la población libre no ciudadana. Esta aparente ausencia de peregrini sorprende si se tiene en cuenta que si se tiene en cuenta que el hábito epigráfico también fue asimilado en ambientes poco romanizados. En Sicca Veneria tan sólo trece personas fueron identificadas por un idionimo seguido de filiación con patronímico y son muy pocas las estructuras nominales bimembres con filiación que pueden estar enmascarando un estatuto peregrino: Appia Galla Lupi filia (CIL VIII, 1674, p. 1523), Clodia Antonii filia Quarta (CIL VIII, 15975), Iulius Mussus Baricis f. (CIL VIII, 27619), Iulius Venustus Quint(ii) filius (CIL VIII, 16073) y Claudius Saturninus Q(uintii) f. (CIL VIII, 27611).

  • 20 Cuando Roma incorporaba territorio anexionado a las colonias, parte de sus habitantes continuaban (...)
  • 21 La frase contiene una expresión técnica (continentiaaedificia) que leemos en las leyes municipa (...)
  • 22 Christol, Magioncalda 1990, p. 328.

14Como era previsible, los investigadores deducen que en Sicca Veneria y su pertica vivía población libre no ciudadana a partir de las condiciones fijadas por P. Licinius Papirianus para la fundación de alimenta en su testamento entre los años 175-180 (CIL VIII, 1641)20. Los beneficiarios de los repartos mensuales (menstruos) fueron niños y niñas con ciudadanía local (municipes) y si no la tenían (incolae) debían residir en edificios ubicados en el interior de la colonia: municipes item incolae dumtaxat incolae qui intra continentia nostrae coloniae aedificia moranbuntur21. Resulta curioso el deseo de Papiriano de restringir el beneficio atendiendo al lugar de residencia de las personas, bien la colonia, bien el territorio rural dependiente de la misma, lo que para Michel Christol y Andreina Magioncalda22 puede responder a la complejidad que presentaba la organización territorial de Sicca Veneria.

  • 23 Lassère 1973, p. 129. En opinión de García Fernández 2012, p. 423-436, sin pensar en esta usurpac (...)

15La confluencia de dos circunstancias explica la aparente ausencia de peregrini en el registro epigráfico. En primer lugar, se aprecia una simplificación onomástica que posiblemente esté ocultando a algunas personas libres no ciudadanas, un fenómeno bien conocido en el Imperio romano a partir del siglo III. Hasta 83 portan sólo un nombre (nomen, cognomen o, con menor frecuencia, antropónimo local), tendencia a la uninominalidad que reduce el número de filiaciones. Igualmente es llamativo el número de hombres con duo nomina, consecuencia de la tendencia a suprimir el praenomen a partir de los siglos II y III, así como de la simplificación onomástica. En segundo lugar, se ha de tener presente la posibilidad de que parte de la población peregrina esté usurpando los nombres gentilicios propios de la onomástica romana. Al detectar en Cirta idén tica ausencia de formas de identificación de tipo peregrino, Jean-Marie Lassère23 se preguntó si parte de la población con tria nomina sin tribu no serían hombres libres carentes de ciudadanía «plus ou moins légalement pourvus d’une onomastique romaine malgré les dispositions en vigueur depuis Claude (Suet., Claud., XXV, 7)».

2. Mujeres con adscripción tribal en la pertica siccense

  • 24 Lassère 1977, p. 219-220.

16La pertica asignada a Sicca Veneria se localiza a 147 Km al sudoeste de Tunicia, en la actual prefectura de El-Kef, y estaba encajonada entre las de Cirta y Carthago. En su día, Jean-Marie Lassère24 trató de reconstruirla apoyándose en la mención de la tribu Quirina y/o en la localización de los lugares donde han sido recogidos epígrafes en los que son mencionados decuriones siccenses.

  • 25 Véase la situación territorial en época julio-claudia sobre el mapa elaborado por Samir Aounallah (...)
  • 26 Kallala 2019.

17Los últimos hallazgos epigráficos, estudiados por Kallala (AE 1999, 1853; 2001, 1878), han permitido fijar sus límites y dejar fuera de ella Tituli (Mahjouba), a 30 Km al sudoeste de El-Kef25. A finales del reinado de Trajano, siguiendo un eje noreste/suroeste, la pertica asignada a la comunidad de Sicca Veneria se extendía al Norte unos 75 Km desde el límite sur de Musti y al Sur hasta el río Zerga. No es posible definir el resto de su contorno con precisión, pero, en algún momento, fueron extensiones administrativas de la colonia: Vcubi (Henchir Kaussat), Nebber (Henchir Sidi Merzoua), Ziccilia (¿Hr El Morr/ El Ksar Lahmar?), Aubuzza (Jezza), Masculula (Hr Guergour), Thubursicu Numidarum (Khamissa) y el pagus Veneriensis (al-Koudiat es-Souda)26.

  • 27 Beschaouch 1981.
  • 28 Aounallah 2010, p. 82-91.
  • 29 Gascou 1983.

18Azzedine Beschaouch y Samir Aounallah han propuesto sendas tesis para explicar cómo pudo estar organizada esta pertica. El primero27 sostiene que, en época alto-imperial, se articulaba en comunidades dobles con territorios propios contiguos y estatutos jurídicos definidos: aglomeraciones urbanas con población básicamente númida de estatuto peregrino (castella) y distritos urbanos dependientes de la colonia habitados por ciudadanos romanos (pagi). Por su parte, Samir Aounallah28 entiende que castellum y pagus conformaban una única realidad en la pertica siccense, tal como Jacques Gascou29 defendió en su día para la cirtense. El castellum sería la capital del pagus, término este último que designaba al castellum como aglomeración cívica principal, pero también al territorio en el que se localizaba.

  • 30 Thugga (pagus et ciuitas Thuggensis: CIL VIII, 26466, 26468, 26526 ; Agbia (pagus et ciuitas: CIL(...)

19Lo cierto es que actualmente no hay prueba documental que sugiera yuxtaposición alguna entre un pagus y un castellum en la pertica siccense, lo que sí está confirmado en la de Carthago30. La organización en comunidades dobles en el territorio asignado a la comunidad de Sicca Veneria únicamente se apoya en la interpretación no definitiva que Beschaouch hace de una dedicación a Caracalla promovida por los decuriones sicc(enses) Vcubi morantes et seniores k(astelli) Vcubis (ILTun 1580). Concluir que los decuriones actuaron en representación del pagus de ciudadanos romanos de Vcubi supone forzar la inscripción que, ciñéndonos a lo que se lee, recuerda cómo los decuriones residentes en Vcubi se sumaron a la asamblea de seniores para honrar al emperador.

  • 31 Sobre los conocidos en Italia, Capogrossi Colognesi 2002 y Sisani 2011 y en el Occidente romano T (...)

20Por lo que concierne a las tesis de Gascou y Aounallah, si efectivamente los pagi de Cirta y Sicca Veneria contaron con un centro cívico, la situación en el África romana sería bien distinta a aquella que la documentación deja entrever en Italia y el Occidente romano31. Cierto es que no necesariamente el pagus provincial tuvo que constituir una misma realidad a lo largo y ancho del Imperio, pero las fuentes a nuestra disposición apuntan a una tendencia a la generalización en cuanto a su funcionamiento.

  • 32 Baroni 2020, p. 3-4, ni se ha llegado a comprobar que sólo hubiera un castellum por pagus, más bi (...)
  • 33 Editado por F. Beltrán Lloris (2006). En el magnífico trabajo de P. Le Roux (2009), el lector enc (...)
  • 34 Le Roux 2009, p. 40, nota 105, quien llama la atención sobre como el oppidum sí es mencionado en (...)

21Hasta donde sabemos, los pagi eran utilizados por la administración imperial para controlar a las comunidades rurales, pero no hay constancia de que contaran con un centro concreto32. Funcionaban como circunscripciones territoriales con fines censitarios, fiscales y como instancia jurídica de arbitraje y represión si no se respetaban los usos locales. El bronce de Agón resulta especialmente interesante33 al mostrar cómo los magistri convocan a los pagani para celebrar un concilium y, sin embargo, no hay indicio alguno de que el pagus dispusiera de una sede34. El argumento ex silentio no prueba nada, pero sorprende que en la ley el pagus carezca de contenido político o administrativo alguno que justificara el disponer de un centro propio, extraño dado que los pagani son convocados a reunirse en asamblea.

  • 35 Aounallah 2010, p. 87-91, 142-143. Los castella todavía existían bajo Caracalla en Nebber (año 21 (...)

22La cuestión sobre la organización territorial de la pertica asignada a la comunidad de Sicca Veneria sigue abierta y parece difícil de resolver dado que nuestro grado de conocimiento sobre ella es bastante limitado. De hecho, tan sólo han podido ser identificados tres castella35: Nebber (Henchir Sidi Merzoug), Vcubi (Henchir Kaussat) y Aubuzza (Henchir Djezza), este último también considerado pagus por la existencia de un paganicum.

23Centraremos la atención en la situación particular de las dos aglomeraciones donde contamos con testimonios de mujeres con tribu.

2.1. AVBVZZA (Ain Jezza, Túnez)

24n.o 2 – BLESSIA C. f. Quir. FLACCHILLA

Referencias: ILTun 1629.

D(iis) M(anibus) s(acrum) / Blessia C(aii) f(ilia) / Quir(ina) Flacc/hilla debit(um) /5 natur(ae) redid/dit nomen hoc / titulo Caelius / Victor con/iugi amantis/10sim(a)e institutit / uix(it) an(nos) XLI h(ic) s(ita) e(st).

  • 36 Lassère 1973, p. 120-121.

25Caecilius Victor quiso tener un recuerdo del momento en que su esposa «pagó su tributo a la naturaleza» a la edad de 41 años. Con este fin hizo grabar un epitafio entre el reinado de Adriano y el primer tercio del siglo III, datación establecida en función de la consagración a los dioses Manes, los nombres de la difunta y del dedicante en caso nominativo, indicación de la edad de deceso y uso de la fórmula h.s.e.36.

  • 37 Schulze 1991, p. 295; H. Solin et O. Salomies en 1988 (p. 35-36) dan entradas diferentes a Blaesi (...)
  • 38 Lassère 1977, p. 90.

26No está claro el origen etimológico del gentilicio que porta Blessia C. f. Quir. Flacchilla, «medio etrusco» según Schulze37 y de limitada difusión en el África romana. Sin duda el núcleo de establecimiento de los Blaes(s)ii / Bles(s)ii fue Saldae (Béjaia, Argelia), ciudad portuaria donde Augusto asentó veteranos. Allí hay cinco testimonios (AE 1976, 754; 2012, 61; CIL VIII, 8944, 20688, 20689), entre ellos el de un centurión que vivió bajo Trajano (AE 2012, 61). Sabemos de la presencia de Blessia Saturnina, cuyo origen hadrumentino se discute38, en Lambaesis (CIL VIII, 3473, p. 1741), donde otro veterano hace una dedicación con posterioridad a la muerte de Geta en 211 (AE 1902, 9, 10, 147, 225).

  • 39 En ILAlg II, 4954 no se cuestiona el desarrollo Q(uirina): --- / Blaesius / Rogati / Q(uirina) Ve (...)

27A éstos hay que sumar otros dos que se datan en el siglo I: el de un veterano inscrito en la Galeria muerto en Ammaedara (AE 2013, 1789) y el de un hombre adscrito a la Quirina, Blaesius Rogati [filius] Q. Verianus (ILAlg II, 4954), sepultado en territorio cirtense, concretamente en Thibilis. La pérdida de la parte superior del memorial de Veriano no afecta a la lectura de su nomenclatura personal más allá de que pudiera haber sido grabado un praenomen. En cambio, impide comprobar si hubo consagración a los dioses Manes, lo que dataría el epitafio a partir del reinado de Adriano. No obstante, la sencillez de la inscripción, el nominativo y la longevidad del difunto – aunque no llegara a alcanzar los 100 años indicados – sitúan su muerte más próxima al siglo I39.

28n.o 3 – CAECILIA DONATA Ilaris fil. Quirina

Referencias: CIL VIII, 16375.

D(iis) M(anibus) s(acrum) / Caecilia / Donata / Ilar{e}<i>s f<i>l(ia), /5 Quirina, / M(arcus) Cae(cilius?) Lib(eralis?), / uixit / annis / LXXXIII

29Como el epitafio que recuerda la muerte de Blessia Flacchilla, este ofrece una datación entre el reinado de Adriano y el primer tercio del siglo III. A pesar de su sencillez, la inscripción plantea un problema interpretativo no relevante para la cuestión aquí estudiada: ¿son una o dos las personas difuntas? A partir del dibujo de Hübner, parece que se trata de una única inscripción encabezada por D.M.S. y no de dos memoriales. Se indica sólo una edad de defunción que, por el lugar que ocupa, parece corresponder a M. Caecilius Liberalis (sus tria nomina fueron engalanados con hederae lo que apunta hacia su condición de difunto y no de dedicante).

  • 40 Kajanto 1982, p. 260.

30El estudio de la antroponimia permite constatar lo poco común que Hilaris es en el África romana. Iiro Kajanto40 lo incluye entre los cognomina que aluden al carácter, concretamente a la jovialidad y alegría, y da entrada a muy pocos testimonios en el Imperio: cinco hombres – sin especificar referencias a corpora – y dos mujeres (CIL VI, 12445, 19272). En el África romana, además de Caecilius Hilaris, lo usaban A. Silicius Hilaris en el castellum Dimmidi (AE 1948, 220) e Hilaris en El Garra (CIL VIII, 198).

  • 41 Sicca: ILTun 1611, CIL VIII, 27602, 15950 (memorial de Vindex); Aubuzza: CIL VIII, 16376; Cirta: (...)

31Ciertos epitafios sin consagración a los dioses Manes confirman el establecimiento antiguo de otros Caecilii en Cirta, Sicca Veneria y Aubuzza, entre los cuales dos estaban inscritos en la Quirina. M. Caecilius L. f. Vindex – nótese que el allegado de Caecilia Donata es un M. Caecilius – muere a la edad de 81 años en Sicca Veneria, mientras que Sex. Caecilius C. f. Potitus fallece en Cirta a los 3041.

  • 42 Rebuffat 1993, p. 1824.
  • 43 CIL VIII, 16368: Genio / imp(eratoris) Caes(aris) Anto/nini Hadriani / Aug(usti uel -usto) /5 L(u (...)
  • 44 La escasa documentación disponible para Italia es difícil de interpretar, pero confirma ambas car (...)
  • 45 Los romanos diferenciaban claramente lo dedicado de lo consagrado, de manera que cuando figura el (...)
  • 46 E. Todisco (2004, p. 204-205) llama la atención sobre la existencia en el mundo romano de estruct (...)

32La mención de Aubuzza como castellum se apoya únicamente en una inscripción a la que René Rebuffat se refirió en los años noventa42, todavía hoy inédita, en la que parece que se hace referencia a los seniores castelli Aubuzzensium. Tampoco hay confirmación epigráfica de que fuera un pagus, pero sabemos que un flamen llamado L. Annaeus Hermes construyó un paganicum bajo el reinado de Antonino43. Se trata de un complejo porticado que acogía un(os) baño(s) y un lugar para dejar caballos, uso comunitario y polifuncional que también tenía en Italia44. No se puede descartar que el paganicum de Aubuzza tuviera un carácter sacro porque la iniciativa de Hermes fue ejecutada bajo el cuidado de otro flamen. Surge la duda de si se quiso señalar el cargo de quién se ocupó de la ejecución o si el sacerdote participó en un acto de dedicatio para transformar el paganico en aedes sacra45. Posteriormente fue restaurado por completo (a solo), iniciativa dedicada al Genio protector de Iulia Veneria Cirta Noua, lo que reafirma su concepción cómo público y conecta la estructura con una funcionalidad cultual (CIL VIII, 16367 = ILTun 1628)46.

33La población que vivió en Aubuzza dejó una discreta huella epigráfica, la de 13 mujeres y una treintena de hombres, cuyas estructuras nominales se clasifican en la tabla 2.

Tabla 2: Población de Aubuzza

Mujeres

Todas sólo con duo nomina excepto

duo nomina + filiación con praenomen

3

1) duo nomina + filiación (nunca praenomen)

1

2) duo nomina + filiación materna + indicación coniux…

1

Hombres

Todos sólo con tria nomina excepto

tria nomina + filiación con praenomen + tribu

5

tria nomina + filiación con praenomen sin tribu

1

tria nomina sin filiación + tribu

1

duo nomina

3

1) Caecilia Donata Ilaris fil(ia) Quirina (n.o 4); 2) Sertoria Saturnina Mariae Plancinae filia, Licini Fortunati coniux (ILTun 1633).

  • 47 Desde aquí mi agradecimiento a los colegas Leonard A. Curchin y José d´Encarnação por sus reflexi (...)
  • 48 Aounallah 2010, p. 89-90.
  • 49 W. Schulze (1991, p. 371) recoge un testimonio del nomen Siluanus: Siluana L. l. Hilara (CIL IX, (...)

34Un dossier tan reducido no resulta representativo para extraer grandes conclusiones sobre el contexto onomástico en el que fueron grabados los epitafios de Blessia Flachilla (n.o 2) y Caecilia Donata (n.o 3), pero llama la atención que nadie en Aubuzza fuera identificado con idionimo seguido de patronímico. Sólo plantea una duda razonable la nomenclatura de Seuerus Siluani Vindicis47, el flamen que actuó como curante en la dedicación de lo ofrecido por Hermes. Aounallah48 sostiene que este personaje porta un cognomen latino seguido de los de su padre y abuelo (Seuerus, hijo de Siluanus, este hijo de Vindex). Aunque no queda claro qué culto servían ambos flamines, no se puede pasar por alto que Siluanus puede ser teónimo además de antropónimo que se usa como cognomen49. De hecho, hay constancia de flamines que consagran a esta divinidad, por ejemplo, un flamen municipii en Dacia (CIL III, 903) y un flamen maximus en Lauinium (CIL XIV, 2092). Consecuentemente, Seuerus pudo servir el culto al dios Siluanus Vindex o actuar como flamen de culto imperial.

2.2. THVBVRSICV NVMIDARVM (Khamissa, Argelia)

35n.o 4 – IVLIA C. f. Quir. SATVRNINA

Referencias: ILAlg I, 1697.

D(is) M(anibus) s(acrum). / Iulia C(ai) fil(ia) / Quir(ina) Satur/nina pia /5 et supra / omnem / pudicitiam, / uix(it) an(nos) XLV, / h(ic) s(ita) e(st)

36n.o 5 – IVLIA ANTONILLA Marci Iuli(i) Quirina filia

Referencias: ILAlg I, 1450.

D(is) M(anibus) s(acrum). / Iulia An[t]o/nil(l)a / M(arci) Iu/5li<i> Quirina / filia. // D(is) M(anibus) s(acrum). / L(ucius) Caecili/us Barbarus / Quirina /10 se uiuo sibi et uxori statu/it mon[i]mentu(m) - > mon˹u˺mentum / p(ius), u(ixit) a(nnos) LXV, h(ic) s(itus) e(st).

37Iulia Saturnina y Iulia Antonilla fueron sepultadas en Thubursicu Numidarum, entre el reinado de Adriano y comienzos del siglo III, y descendían de un Caius Iulius y de un Marcus Iulius respectivamente.

  • 50 ILAlg I, 1664.
  • 51 ILAlg II, 1242.
  • 52 La lex Iulia municipalis de 18 a.C. obligó a incluirlo, buena prueba de lo generalizado que su de (...)
  • 53 ILAlg II, 1242.
  • 54 ILAlg II, 1290.
  • 55 ILAlg II, 1270.
  • 56 ILAlg II, 1298.
  • 57 ILAlg II, 1288. Nótese que en esta época todavía el praenomen no es hereditario. De acuerdo con T (...)

38Encontramos Caii Iulii inscritos en la Quirina viviendo en esta aglomeración siccense desde el siglo I cuando fallece C. Iulius [---] f. Q. Praesens50. En cuanto a los Marcii Iulii con Quirina, el nombre de M. Iulius Quir. se lee en un epitafio51 consagrado a los dioses Manes en Thubursicu Numidarum, pero la falta de cognomen acerca su datación a la primera centuria52. También en Cirta la epigrafía confirma la presencia tanto de Caii Iulii como de Marcii Iulii adscritos a la Quirina desde el siglo I: M. Iulius C. f. Quir. Bifus53, C. Iulius C. f. Quir. Pius54, M. Iulius M. f. Quir. Iulianus55, L. Iulius C. f. Q. Saturninus56, D. Iulius C. f. Quir. Palma57. En cambio, en Sicca Veneria los ciudadanos romanos pertenecientes a ambas ramas de la gens Iulia que dejaron huella epigráfica vivieron en un momento posterior.

39En la nomenclatura personal de Iulia Saturnina, la filiación y la tribu ocupan el lugar canónico – entre el nomen y cognomen –, pero no en la de Iulia Antonilla Marci Iuli(i) Quirina filia. Nótese que contiene el praenomen, nomen y la tribu Quirina sin duda asociada al padre. Como hipótesis, en ILAlg I, 1450 se plantea que Quirina pudiera ser abreviatura del cognomen Quirina(lis?), de manera que el progenitor de Iulia Antonilla sería M. Iulius Qurinalis. Sin embargo, es impensable que el cognomen se abreviara de forma idéntica a la tribu de quien encargó la sepultura en vida para él y su esposa. Nótese cómo también se quiso dar un especial protagonismo a la tribu de L. Caecilius Barbarus grabándola igualmente sin abreviar. La coincidencia hubiera introducido una confusión interpretativa innecesaria.

  • 58 Gsell, Joly 1914, p. 11, donde el lector podrá consultar un minucioso análisis sobre los restos r (...)

40Thubursicu Numidarum sin duda fue centro de una tribu númida. Se sabe de la existencia de dos principes gentis Numidarum (ILAlg I, 1297, 1341) y tal vez se trate del oppidum Thubuscum al que se refiere Tácito (ann. IV, 24) como el lugar sitiado por el númida Tacfarinas en 23-24. Un rico dossier epigráfico permite reconstruir la evolución estatutaria de esta aglomeración siccense, muy próxima al territorio de la Confederación cirtense. La ciuitas Thubursicitana dedicó a Trajano en el año 100 (ILAlg I, 1244) y bajo su reinado alcanzó estatuto municipal (municipium Vlpium Traianum Augustum Thubursicu (ILAlg I, 1240), siendo sus ciudadanos adscritos a la tribu Papiria58. Posteriormente se convirtió en colonia, circunstancia acreditada epigráficamente en tiempos de Claudio II el Gótico (ILAlg I, 1268) y Aureliano (ILAlg I, 1269).

  • 59 Aounallah 2022, p. 167.
  • 60 ILAlg I, p. 115-116, plantea que la gens pudo perdurar un tiempo como unidad administrativa subor (...)

41El topónimo completo sólo está documentado después de la concesión del estatuto municipal (ILAlg I, 1237, 1283). Si entonces se añadió Numidarum puede estar reflejando la notable presencia de miembros de la gens Numidarum en el municipio. Otra posibilidad es que la población peregrina, los incolae que dedican al rey Hiempsal II junto a los ciues Thubursicenses II (ILAlg I, 1242), obtuviera la ciudadanía local como beneficio del emperador59. No hay duda de que la élite de poder númida se integró en sus cuadros dirigentes, como el princeps de la gens ciudadano romano que ocupó un flaminado perpetuo en el municipio (ILAlg I, 1297)60.

42El rastro epigráfico dejado por la población peregrina en Thubursicu Numidarum es importante (véase tabla 3), una situación muy diferente a la constatada en Sicca Veneria y Aubuzza, por lo que cabe pensar que si Trajano concedió la ciudadanía siccense a los peregrini, no debió tratarse de un beneficio generalizado.

Tabla 3: Población de Thubursicu Numidarum

Mujeres

Todas sólo con duo nomina excepto

duo nomina + filiación con praenomen

3

1) duo nomina + filiación (nunca praenomen)

1

2) duo nomina + filiación materna + indicación coniux…

1

Hombres

Todos sólo con tria nomina excepto

tria nomina + filiación con praenomen + tribu

5

tria nomina + filiación con praenomen sin tribu

1

tria nomina sin filiación + tribu

1

duo nomina

3

1) En el caso de Domitius Q. f. Festus (ILAlg I, 1533) no se puede descartar que Quintus sea nombre personal y no praenomen.
2) La filiación contiene el praenomen Lucius usado como nombre único en dos sencillos epitafios (ILAlg I, 1642, Iulius L. f. y ILAlg I, 1825, Postumius Luci f.) y en otro en el que el difunto, Marhulus L. f., comparte sepultura con una mujer peregrina (ILAlg I, 1754).

43Otros elementos característicos del contexto onomástico de Thubursicu es la mayor frecuencia con la que se indican tanto la tribu como la filiación, lo que muestra las diferencias locales a la hora de construir nomenclaturas personales. En la filiación de las mujeres es especialmente llamativa la tendencia a señalar no sólo al padre, sino también al cónyuge («uxor de…»). La expresión, bien se añade a la filiación del progenitor (19 con duo nomina y 14 con nombre único), bien se menciona exclusivamente sin remitir a él (22 con duo nomina y 9 con nombre único).

3. Valoración conjunta de los testimonios

  • 61 Puestas de relieve en Foreign clientelae 2015, a propósito de la revisión de la clásica obra de E (...)
  • 62 Como acontece con los Sittii que se concentran en la región de Cirta, cuyo gentilicio es posible (...)

44Conviene recordar las limitaciones que el análisis onomástico tiene61 si hay gran distancia temporal entre el momento en que fue grabado un epígrafe que contiene un determinado nomen o cognomen – gran parte de las inscripciones recogidas en África datan de los siglos II y III – y aquel en el que pudieron ser introducidos. En cambio, está justificado relacionar a portadores de nomina y cognomina poco difundidos62, como algunos presentes en la nomenclatura de las mujeres con tribu que vivieron en Sicca Veneria y su pertica.

45En el África romana se recogen muy pocos testimonios de los gentilicios Palpenius, Blaessius y del cognomen Hilaris, lo que revela una ascendencia foránea por vía paterna, más o menos remota, de Palpenia Venusta (n.o 1), Blessia Flacchilla (n.o 2) y Caecilia Donata, hija de Hilaris (n.o 3).

  • 63 Sobre los acontecimientos en los que el África romana se vio implicada, entre otros: HAAN VII 192 (...)

46Sus antepasados fueron ciudadanos romanos llegados a África a partir del siglo II a.C., cuando fue recalando población civil y militar desde Italia. La primera se desplazó movida preferentemente por intereses económicos, una corriente migratoria difícil de rastrear, si bien hay ciertos testimonios epigráficos probatorios como el epitafio que recuerda la muerte del negotiator P. Caecilius en Cirta durante la primera centuria (ILAlg II, 977). También fueron asentados en territorio africano numerosos soldados, de origen itálico y de otras provincias, que combatieron en las guerras civiles durante el convulso siglo I a.C. en Roma 63.

  • 64 Lassère 1977, p. 90.

47El memorial de Palpenia Venusta (n.o 1) confirma la presencia de Palpenii en Sicca Veneria a comienzos del siglo I. De hecho, esta mujer pudo ser descendiente directa de alguno que se instaló en la región antes de que Sicca recibiera estatuto colonial. La introducción en África del nombre gentilicio de Blessia Flachilla (n.o 2) se relaciona con la deductio llevada a cabo por Augusto en Saldae64, pero no es posible situar en el tiempo la del cognomen Hilaris que usaba el padre de Caecilia Donata (n.o 3).

  • 65 Lassère 1977, p. 462.

48A diferencia de las mujeres con tribu que dejaron huella epigráfica en Sicca Veneria y el pagus de Aubuzza, los padres de las dos Iuliae sepultadas en Thubursicu Numidarum usaban combinaciones de praenomen y nomen muy difundidas. Iulia Saturnina (n.o 4) era hija de un Caius Iulius, por lo que podría pensarse que su padre descendía de un autóctono a quien César había concedido la ciudadanía romana. Por su parte, Iulia Antonilla Marci Iuli(i) Quirina filia (n.o 5) lo era de un Marcus Iulius, binomio introducido en África con los veteranos de Mario65.

  • 66 La elección del procónsul como patrono de la ciudad es una práctica que pervive en época imperial (...)

49Las concesiones viritanas de la ciuitas Romana por generales y altos magistrados, especialmente los gobernadores provinciales, contribuyeron a que se extendiera entre la población local que, a veces, tomaba los praenomina y/o gentilicios de sus benefactores, en ocasiones también patronos66. Sin embargo, el notable número de Caii Iulii en el África romana hace que, desde un punto de vista metodológico, no sea riguroso interpretar necesariamente que todos descendían de un receptor de la ciudadanía de César. Otro tanto puede decirse sobre los Marcii Iulii, a quienes no se puede considerar sistemáticamente descendientes de un soldado asentado a finales del siglo II a.C.

50Ahora bien, en Thubursicu Numidarum hay que introducir un criterio corrector en el análisis onomástico basado en estos presupuestos, a saber: la epigrafía confirma la presencia de Caii Iulii y Marcii Iulii inscritos en la Quirina desde el siglo I, lo que nos acerca a época tardo-republicana. Al ser un territorio muy concreto y antiguo el establecimiento de estas ramas de la gens Iulia, es lícito relacionar a quienes portan los binomios e hicieron su vida en la aglomeración. Sin embargo, resulta imposible precisar si los lejanos antepasados de las Iuliae eran inmigrantes civiles, militares, autóctonos que recibieron la ciuitas Romana a título personal o tomaron un praenomen y un nomen muy populares.

51Los epígrafes que nos dan a conocer a las cinco féminas con tribu fueron grabados en contextos onomásticos en los que la filiación recibió un tratamiento distinto. Este elemento tiene un valor personalizador porque señala directamente al padre si contiene un nombre personal de difusión limitada, como es el caso de Hilaris. En cambio, cuando forma parte de ella un praenomen proporciona información sobre la rama familiar paterna.

52Tanto en Sicca Veneria como en el pagus de Aubuzza no era nada frecuente incluir la filiación, por lo que resulta llamativo encontrarla en la nomenclatura personal de todas las mujeres con adscripción tribal: Palpenia Venusta L. f. Q. (n.o 1), Blessia C. f. Quir. Flacchila (n.o 2) y Caecilia Donata Ilaris fil. Quirina (n.o 3). Se aprecia una intención de ofrecer información complementaria a la proporcionada por los gentilicios de los progenitores que ellas tomaron de ellos. En Sicca Veneria la presencia de ciudadanos romanos inscritos en la Quirina hubo de ser mayoritaria, pero los Palpenii no dejaron otra huella que el epitafio de Palpenia Venusta. Su padre, un inmigrante llamado L. Palpenius debió ser un hombre bien conocido perteneciente a una familia con limitada presencia en la colonia. En Aubuzza, donde la población fue significativamente más reducida atendiendo al dossier epigráfico que generó, la filiación y la tribu convierten a C. Blessius y Caecilius Hilaris en fácilmente identificables como dos de los ciudadanos romanos que vivían en el pagus.

53El memorial que recuerda la muerte de Iulia Antonilla Marci Iuli(i) Quirina filia (n.o 5) en Thubursicu Numidarum fue grabado en un contexto onomástico, en el que, sin ser la filiación frecuente, en la de las féminas está arraigada la práctica de vincular al padre y al esposo con ellas. La de esta mujer resulta trascendental para el tema estudiado porque incluye el praenomen, el nomen, pero también la adscripción tribal paterna. No hay duda de que la tribu se refiere expresamente al progenitor, no proporciona información concerniente a la difunta. Nótese que interesó presentarle simplemente como un Marcius Iulius (sin abreviar) y no se vio necesidad alguna de mencionar su cognomen.

  • 67 Se trata de una transferencia de tribu per domicilii translationem, Forni 1966. Los agregados a u (...)
  • 68 En el momento de la deductio, no siempre los foráneos con ciudadanía romana tomaban la tribu asig (...)
  • 69 En el mundo romano la origo era la ciudadanía local que vinculaba a la persona en exclusividad a (...)

54La Quirina hace pensar que las familias paternas de las cinco féminas eran originarias de Sicca Veneria o de Cirta. Los ciudadanos con residencia legal que pertenecían a una comunidad eran inscritos a una misma tribu, pero un establecimiento duradero en un lugar distinto de aquel donde se tenía la origo natural podía venir acompañado de un cambio de adscripción tribal67. Este fue el caso del Palpenius instalado en Sicca Veneria que acabó tomando la Quirina, del Hilaris con quien se relaciona el padre de Caecilia Donata y de los Blaessi que hicieron su vida en la pertica de Cirta durante el siglo I y en el pagus de Aubuzza, que sepamos, en un momento posterior68. Por lo que concierne a los padres de las dos Iuliae (nos 4, 5), conservaron su origo por nacimiento y, consecuentemente, la tribu. Sus antepasados o ellos mismos no tomaron la Papiria, a la que fueron adscritos los ciudadanos romanos en Thubursicu Numidarum cuando esta aglomeración recibió estatuto municipal bajo Trajano69.

  • 70 Fenómeno bien estudiado en todas sus dimensiones por J.-M. Lassère (1977, p. 597-644).
  • 71 Lassère 1977, p. 459-463.
  • 72 Syme 1951, p. 128.
  • 73 Bertrandy 1996, p. 50-53. Los Laberii de Thubursicu representan hasta cinco generaciones pertenec (...)

55La tribu Quirina incluida en la nomenclatura personal de Blessia Flachilla (n.o 2), Caecilia Donata (n.o 3) y las Iuliae (n.os 4, 5) testimonia una movilidad geográfica70 de ciudadanos romanos hacia la pertica de Sicca Veneria. Como se ha comentado, la epigrafía confirma que esta corriente migratoria se remonta al siglo I y que debió de ser muy intensa atendiendo a las menciones de dicha tribu recogidas tanto en Aubuzza (sólo 6 y todas son de la Quirina) como en Thubursicu, donde hay más testimonios de la Quirina que de la Papiria71. Algunos de los enterrados en esta aglomeración eran de origen foráneo y ciudadanos en Sicca Veneria, donde llegaron a ocupar magistraturas durante el siglo I. Tal fue el caso de dos miembros de la gens Laberia, el edil y duunviro L. Laberius M. f. Quir. Prudens (ILAlg I, 1347) y el aedilicius L. Laberius L. f. Quir. Vibullus (ILAlg I, 1348). Se les atribuye un origen campaniense72, de Lanuuium o del Lacio73, pero desconocemos si descendían de inmigrantes itálicos o de veteranos instalados a fines de época republicana.

56Las cinco mujeres con tribu tienen en común una ascendencia foránea por vía paterna, lo que supone que sus progenitores disfrutaban de una ciudadanía romana de viejo cuño. Esta circunstancia fue percibida por sus allegados como una marca de estatus digna de ser recordada en sus memoriales. Con tal fin, hicieron grabar la filiación y la adscripción tribal de los padres – el caso de Iulia Antonilla es elocuente – en su nomenclatura personal y en contextos onomásticos donde no era frecuente consignar ninguno de estos dos elementos. La intención fue dar visibilidad a la condición de ciudadanos romanos de los progenitores, portadores de una antroponimia de introducción antigua en el África romana.

  • 74 De acuerdo con V. Marotta (2009, p. 91-100) la communis patria comprendería, por una parte, la pa (...)

57La adscripción tribal de una persona indica su pertenencia exclusiva a Roma, communis patria de quienes disfrutan del estatuto jurídico de ciudadano romano, que también tenían una ciudadanía de contenido administrativo en su lugar de origen, su patria local donde disfrutaban de derechos y obligaciones74. Ya se ha comentado la limitada indicación de la tribu en gran parte del África romana, incluso durante el siglo I, lo que muestra cómo la condición jurídica determinada por el disfrute de la ciuitas Romana no debió ser percibida socialmente como algo especialmente prestigioso. Esta visión fue propia de la mentalidad de una minoría de la población, independientemente de cuándo vivió, entre ella el círculo social de estas cinco mujeres con tribu.

58El contenido que se dio a la tribu en la nomenclatura personal de las mujeres evidencia su relación con la filiación y el origen ciudadano, completamente desvinculada de la realidad política y jurídica. En los casos hispanos, una circunstancia personal, no necesariamente coincidente, explica por qué la tribu fue asociada a cada una de ellas. En la sepultura que Cretonia Maxima encargó para ella y su hijo, hizo grabar la tribu Papiria de los ciudadanos en Augusta Emerita para indicar que ella también la había recibido, aunque era originaria de Pax Iulia tal como da a conocer su gentilicio (Pacensis). En el epitafio de Calpurnia Andrana y de P. Paperius Niger, la tribu Quirina figura tras sus duo nomina y tria nomina respectivamente. Accedieron a la ciudadanía romana en el municipio latino de Baedro, donde dejan huella epigráfica. Con la tribu y el gentilicio insisten en su origen local, a través del cual tuvieron acceso a la ciudadanía romana.

  • 75 Desde aquí mi agradecimiento a Antonio Ibba por su ayuda y sugerentes comentarios en la fase prev (...)

59Lo que tienen de particular las féminas con tribu que vivieron en Sicca Veneria y su pertica es que hay un nexo común que, por tanto, necesariamente ha de estar interviniendo cuando quienes dedican los memoriales piden incluir la tribu en el nombre de las difunt: el origen foráneo de sus familias paternas con ciudadanía antigua. En Thibilis, es imposible que sean razones de índole personal las que explican las más de 80 menciones de mujeres con tribu, una interesante situación que precisa de un estudio específico75.

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Notes

1 Aglomeración localizada en la pertica cirtense, donde se documenta la sorprendente cifra de en torno a 80 mujeres con tribu.

2 Forni 1976, p. 39, Encarnação 2002-2003, p. 129 ; Le Roux 2010, p. 118 ; González Herrero 2021, p. 557-561.

3 Lassère 1973, p. 129.

4 Se parte de las lecturas del CIL a complementar con las contenidas en los corpora epigráficos que reúnen las inscripciones halladas en Túnez (ILTun) y Argelia (ILAlg). Ha quedado descartada una inscripción hallada en Vcubi (Kaussat) porque la restitución de la tribu es conjetura: D.M.S. / Cartilia / C. fil. O[V---] /VR [---] /5 pia uixit / ann[---] / h.s.e. (CIL VIII, 15682). Para identificar las estructuras nominales de los hombres y mujeres que dejaron huella epigráfica en Sicca Veneria y dos aglomeraciones de su pertica se ha usado el EDCS: Epigraphik Datenbank Clauss-Slaby, sin contrastar lecturas. El margen de error que pudiera haber en este cómputo – no se han considerado nomenclaturas personales con elementos dudosos – no distorsiona las conclusiones en los dosieres epigráficos cuantitativamente representativos.

5 Desde el siglo I, en Lusitania e Hispania Citerior contamos con testimonios recogidos también en ciuitates del interior, lo que significa que Q(uirina) resultaba comprensible incluso en ambientes indígenas, González Herrero 2013.

6 La alternativa para desarrollar la Q. en el epitafio de Palpenia Venusta sería q(uae) uixit annos. Sin embargo, una rápida búsqueda en el EDCS: Epigraphik Datenbank Clauss-Slaby revela que, en Sicca Veneria, la expresión uixit annos no suele ir precedida del pronombre relativo.

7 Schulze 1991, p. 206; Solin, Salomies 1988, p. 136

8 No aparece en los índices onomásticos de las inscripciones latinas de Túnez y del África romana elaborados por Z.B. Ben Abdallah et L. Ladjimi Sebai (1983).

9 ILS 946 (Pola), CIL XIV, 2241 (mons Albanus), AE 1984, 221; 2001, 807; 1988, 333; 1984, 220 (Pompeya) ,; Ben Romdhane 2016.

10 Ferchiou 19854, p. 182-184.

11 De acuerdo con los criterios definidos para datar los epitafios paganos hallados en África por J.-M. Lassère (1973, p. 120-121).

12 En CIL VIII, 1632 y 1648 leemos Iulia Veneria Cirta Noua Sicca. N. Kallala (2000, p. 89-96), sostiene que la denominación Cirta Noua comenzó a ser utilizada oficiosamente en un momento tardío – no está documentada en la nomenclatura completa de Iulia Sicca Veneria antes de Cómodo –, cuando se pusieron de moda las titulaturas pomposas. El nombre sería un reflejo de cómo históricamente fue percibida como una nueva Cirta, con la que comparte estatuto de colonia Iulia y elemento poblacional (según S. Aounallah [2010], también una organización territorial similar de su pertica). En ILAlg I, 1348 es mencionado un aedilicius Col. Iul. Cirta Noua, fallecido en Thubursicu Numidarum en el siglo I, Bertrandy 1996, p. 47.

13 Sobre la urbanización de África antes de la llegada al poder de los Flavios: HAAN VII 1928, p. 181-182 ; Broughton 1929, p. 49-68 ; Vittinghoff 1952, p. 81-85 y 110-118 ; Teutsch 1962, p. 120-126 y 229-233 ; Gascou 1972, p. 21-27 y la excelente síntesis de A. Ibba (2020).

14 La reconfiguración fue coincidente con la unificación de Africa Noua y Africa Vetus en la provincia África proconsular, episodio de cronología debatida (¿40-39 a.C. o 29-27 a.C.?) analizado en el reciente congreso subordinado al tema de la pertica de Carthago, cuyas actas acaban de ver la luz: La pertica 2022 (consúltense especialmente las contribuciones dentro del apartado III).

15 Véanse las tablas elaboradas por J.-M. Lassère (1977, p. 150-155, 169-204). De acuerdo con N. Kallala (2019, p. 7365), no hay que descartar una migración espontánea por la atracción que ejercería Sicca como nueva capital de Africa Noua a partir de 44 a.C. La muerte de P. Sittius pudo propiciar que la vecina Cirta perdiera su condición de centro de poder del “reino” que había constituido en el territorio que le fue concedido por César, ahora rápidamente incorporado a Africa Noua.

16 Lo que se explica porque es el nomen el que define el estatuto jurídico ciudadano, tal como comprobaron A. Chastagnol (1995) o G. Forni (1997).

17 Así lo constató J.-M. Lassère (1973, p. 129) en Carthago, Thugga, Ammaedara, Thala, Lambaesis, Theueste y Cirta (véanse las tablas con los testimonios por intervalos cronológicos). Thibilis representa una llamativa excepción que merece un estudio particular.

18 Chastagnol 1990.

19 M. Dondin-Payre (2001, p. 259-283) propone criterios alternativos para detectar a la población peregrina.

20 Cuando Roma incorporaba territorio anexionado a las colonias, parte de sus habitantes continuaban residiendo en él, pero en situación de inferioridad jurídica, personas libres sin ciudadanía local identificadas como incolae en las fuentes literarias y epigráficas, Gagliardi 2006, p. 27-28. A partir del edicto de Caracalla (212) se acabó con la distinción entre los incolae sin ciudadanía romana y los ciues, pasando el término a designar sólo a quienes decidían trasladar el domicilio voluntariamente a un municipio o colonia de donde no eran originarios y, si lo tenían fuera del oppidum, además poseían un praedium, Portillo Martín 1983, p. 15, 87 ; Gagliardi 2006, p. 44-45.

21 La frase contiene una expresión técnica (continentiaaedificia) que leemos en las leyes municipales y en la jurisprudencia, Christol, Magioncalda 1990, p. 328. S. Aounallah (2010, p. 84) plantea que posiblemente los incolae excluidos fueran peregrinos carentes de la ciudadanía siccense descendientes de las poblaciones locales y libres que no habían recibido la ciuitas Romana con la deductio. Había incolae tanto en la ciudad como en su pertica conviviendo con ciudadanos que sí se beneficiaron de la fundación de Papirianus como municipes siccenses que eran. Sobre esta interesante inscripción véase también Jacques 1992, p. 212 y Kallala 2004.

22 Christol, Magioncalda 1990, p. 328.

23 Lassère 1973, p. 129. En opinión de García Fernández 2012, p. 423-436, sin pensar en esta usurpación difícilmente podría explicarse el uso generalizado de estructuras onomásticas romanas en los municipios latinos béticos.

24 Lassère 1977, p. 219-220.

25 Véase la situación territorial en época julio-claudia sobre el mapa elaborado por Samir Aounallah en La pertica 2022.

26 Kallala 2019.

27 Beschaouch 1981.

28 Aounallah 2010, p. 82-91.

29 Gascou 1983.

30 Thugga (pagus et ciuitas Thuggensis: CIL VIII, 26466, 26468, 26526 ; Agbia (pagus et ciuitas: CIL VIII, 1548 = 1550), Numlulis (pagus et ciuitas Numlulitanae: CIL VIII, 23121), Sidi Zehili (pagus et ciuitas Avensesis: CIL VIII, 26157). Diseminada por gran parte de África proconsular, la evolución de la pertica de Carthago es ciertamente compleja, ya que fue creada por César, reorganizada por Octavio / Augusto cuando nace la provincia y comienza a ser desmantelada por los Antoninos. Las comunidades establecidas en la pertica imperial recibieron diferentes estatutos jurídicos: además de la doble de Thugga, sabemos de un pagus de ciudadanos romanos (Vchi Maius), de la ciudad autónoma de Thignica dividida en dos agrupaciones, una de peregrinos y otra de ciudadanos romanos, junto a ciudades vecinas dependientes de la pertica donde convivía población libre sin ciudadanía y con ciuitas Romana, de grandes dominios contiguos pertenecientes al emperador o a la aristocracia. Sobre la pertica de Carthago, los trabajos de referencia son el de St. Gsell (HAAN VIII 1928, p. 184, 186, 191, 196), los de J. Gascou (1972, p. 24 y 1982, p. 142, 144, 145) y los contenidos en La pertica 2022.

31 Sobre los conocidos en Italia, Capogrossi Colognesi 2002 y Sisani 2011 y en el Occidente romano Tarpin 2002 ; Todisco 2004 y Le Roux 2009.

32 Baroni 2020, p. 3-4, ni se ha llegado a comprobar que sólo hubiera un castellum por pagus, más bien hay indicios de lo contrario. La autora concluye que el sentido de castellum como aglomeración sin estatuto particular parece ser la interpretación menos contraindicada con el corpus documental a nuestra disposición.

33 Editado por F. Beltrán Lloris (2006). En el magnífico trabajo de P. Le Roux (2009), el lector encontrará la prolífica bibliografía que la excepcional llamada lex riui Hiberiensis ha generado.

34 Le Roux 2009, p. 40, nota 105, quien llama la atención sobre como el oppidum sí es mencionado en la lex Irnitana.

35 Aounallah 2010, p. 87-91, 142-143. Los castella todavía existían bajo Caracalla en Nebber (año 213, CIL VIII, 1615 = 15721) y Vcubi (año 215, CIL VIII, 15669).

36 Lassère 1973, p. 120-121.

37 Schulze 1991, p. 295; H. Solin et O. Salomies en 1988 (p. 35-36) dan entradas diferentes a Blaesius, Blesius y Blessius y en 1994 (p. 34-35) consideran Blaesus dudoso.

38 Lassère 1977, p. 90.

39 En ILAlg II, 4954 no se cuestiona el desarrollo Q(uirina): --- / Blaesius / Rogati / Q(uirina) Verianus, / u(ixit) a(nnos) CXI, / h(ic) s(itus) e(st).

40 Kajanto 1982, p. 260.

41 Sicca: ILTun 1611, CIL VIII, 27602, 15950 (memorial de Vindex); Aubuzza: CIL VIII, 16376; Cirta: ILAlg II, 979 (memorial de Potitus).

42 Rebuffat 1993, p. 1824.

43 CIL VIII, 16368: Genio / imp(eratoris) Caes(aris) Anto/nini Hadriani / Aug(usti uel -usto) /5 L(ucius) Annaeus Hermes, flam(en) / et tribunus IAR (?) gentis AI[.]IA, / (centuria) Eron(is), paganicu[m] et portic(um) / et caldar(ium uel -a) et c(o)horte(m) cum om/nibus ornamentis a solo /10 s(ua) p(ecunia) fec(it) id(em)q(ue) ded(icauit), / curatore Seuero, Sil/uani Vindicis flam(ine) p(er)p(etuo). El pórtico parece ser un elemento arquitectónico asociado a la propia estructura, dado que un magister pagi de condición liberta sufragó un paganicum et porticum para los pagani del pagus Veneria, en la pertica astigitana, Ventura Villanueva, Stylow 2015.

44 La escasa documentación disponible para Italia es difícil de interpretar, pero confirma ambas características, Todisco 2004.

45 Los romanos diferenciaban claramente lo dedicado de lo consagrado, de manera que cuando figura el término dedicante o se alude al cuidado (curante, curatore…), podemos concluir que hubo una sacralización, González Herrero 2015.

46 E. Todisco (2004, p. 204-205) llama la atención sobre la existencia en el mundo romano de estructuras termales con edificios de culto, lo que encaja con la concepción del paganico de Aubuzza como un espacio sacro con un caldario. Por su parte, R. Rebuffat (1991), sostiene que un paganicum podría acoger el juego de la pila paganica que tendría cabida en conjuntos termales.

47 Desde aquí mi agradecimiento a los colegas Leonard A. Curchin y José d´Encarnação por sus reflexiones a propósito de este epígrafe.

48 Aounallah 2010, p. 89-90.

49 W. Schulze (1991, p. 371) recoge un testimonio del nomen Siluanus: Siluana L. l. Hilara (CIL IX, 4428). El epígrafe está muy fragmentado y la parte legible de la inscripción no permite concluir si Hilara es el cognomen de Silvana o el nombre de una de las libertas de un tal Q. Vedus.

50 ILAlg I, 1664.

51 ILAlg II, 1242.

52 La lex Iulia municipalis de 18 a.C. obligó a incluirlo, buena prueba de lo generalizado que su desuso estaba entre los ciudadanos romanos. En opinión de H. Thylander (1952, p. 100), el empleo del cognomen no se hizo habitual hasta el reinado de Claudio.

53 ILAlg II, 1242.

54 ILAlg II, 1290.

55 ILAlg II, 1270.

56 ILAlg II, 1298.

57 ILAlg II, 1288. Nótese que en esta época todavía el praenomen no es hereditario. De acuerdo con Thylander 1952, p. 66-67, hacia mediados del siglo I deja de tener un valor individual.

58 Gsell, Joly 1914, p. 11, donde el lector podrá consultar un minucioso análisis sobre los restos romanos hallados en Khamissa.

59 Aounallah 2022, p. 167.

60 ILAlg I, p. 115-116, plantea que la gens pudo perdurar un tiempo como unidad administrativa subordinada al municipio o, menos probablemente, que Numidarum sobrevivió a su desaparición como título honorífico.

61 Puestas de relieve en Foreign clientelae 2015, a propósito de la revisión de la clásica obra de E. Badian (1958), en la que defendía rastrear los nomina itálicos en las provincias para identificar clientelas. Concretamente para África, véase el sugerente trabajo de F. Hurlet (2015).

62 Como acontece con los Sittii que se concentran en la región de Cirta, cuyo gentilicio es posible vincular con P. Sittius, Hurlet 2015, p. 170, 172, 176.

63 Sobre los acontecimientos en los que el África romana se vio implicada, entre otros: HAAN VII 1928, p. 265-293, las síntesis de A. Mastino (1990) e Y. Le Bohec (2005, p. 29-51).

64 Lassère 1977, p. 90.

65 Lassère 1977, p. 462.

66 La elección del procónsul como patrono de la ciudad es una práctica que pervive en época imperial en el África romana. Sobre las razones que pueden explicar esta excepcional situación indaga F. Hurlet (2015, p. 180-182).

67 Se trata de una transferencia de tribu per domicilii translationem, Forni 1966. Los agregados a una comunidad cívica mediante adlectio no siempre cambiaban su tribu, pero sí cuando residían en el lugar que les acogía entre sus ciudadanos, González Herrero 2018.

68 En el momento de la deductio, no siempre los foráneos con ciudadanía romana tomaban la tribu asignada a sus ciudadanos. S. Demougin (2012, p. 101-102) comenta el caso de dos C. Mucii hermanos deducti en Filipos (colonia creada en 42 a.C. y refundada en 30 a.C.): el primipilo C. Mucius Q. f. Fab. Scaeua (AE 1934, 61) y el centurión C. Mucius Q. f. Vol. (AE 1934, 62). El primero conservó la tribu Fabia y el segundo tomó la Voltinia, en la que fueron inscritos los ciudadanos romanos en la colonia.

69 En el mundo romano la origo era la ciudadanía local que vinculaba a la persona en exclusividad a un lugar. En caso de padre legítimo y en virtud del ius connubii, lo habitual era que se adquiriera en el momento del nacimiento y se transmitiera por filiación paterna junto a la ciuitas Romana del progenitor y, por tanto, la tribu en la que éste estaba inscrito. Por ello, la tribu está vinculada a la filiación, no al territorio. La historia jurídica de la origo puede consultarse en Thomas 1996, p. 103-132.

70 Fenómeno bien estudiado en todas sus dimensiones por J.-M. Lassère (1977, p. 597-644).

71 Lassère 1977, p. 459-463.

72 Syme 1951, p. 128.

73 Bertrandy 1996, p. 50-53. Los Laberii de Thubursicu representan hasta cinco generaciones pertenecientes a dos ramas familiares.

74 De acuerdo con V. Marotta (2009, p. 91-100) la communis patria comprendería, por una parte, la patria local – única y exclusiva – y por otra la patria iuris otorgada por el Estado romano que sólo puede ser una.

75 Desde aquí mi agradecimiento a Antonio Ibba por su ayuda y sugerentes comentarios en la fase previa a la elaboración de este trabajo.

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Pour citer cet article

Référence papier

Marta González Herrero, « Testimonios de mujeres con tribu en Sicca Veneria y su pertica »Antiquités africaines, 59 | -1, 137-148.

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Marta González Herrero, « Testimonios de mujeres con tribu en Sicca Veneria y su pertica »Antiquités africaines [En ligne], 59 | 2023, mis en ligne le 15 décembre 2023, consulté le 06 février 2025. URL : http://0-journals-openedition-org.catalogue.libraries.london.ac.uk/antafr/6353 ; DOI : https://0-doi-org.catalogue.libraries.london.ac.uk/10.4000/antafr.6353

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Auteur

Marta González Herrero

Universidad de Oviedo, Facultad de Filosofía y Letras, Departamento de Historia, Área de Historia Antigua, despacho 2202
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